Ese fue uno de sus grandes errores, y quizás el peor de todos: era ya tan viejo que se le arrugó y acartonó no solo la cara sino tambien la mente; y los años fueron el mejor aliado para su comodidad. Perdió sus ganas de aprender, y quiso ganar autoridad a base de certezas de humo. Pensaba que ya se lo sabia todo y que estaba de vuelta de todo, y no se dio cuenta de que habia infinidad de sitios y lugares que sus pies jamás habian pisado.Saludos.
Me has hecho recorda a Ingenieros y sus sentires de la "vejez"
ResponderEliminarLos hay son acartonados y .....cometen muchos errores, por acá tenemos algunos.
Cariños y para ti tambien una buena semana!!!!
Espero no dejarme caer en ese tremendo error, amigo mío. Ojalá mis arrugas no lleguen a acartonar mi mente y siempre tenga las ansias de aprender que mi madre tenía hasta el mísmo día de su fallecimiento con 84 años.
ResponderEliminarQue tus pies te lleven por caminos que siempre te resulten desconocidos para seguir aprendiendo de ellos, querido Cornelivs.
Feliz semana
Espero que eso no me llegue a ocurrir nunca, aunque la piel sea irreconocible, arrugada y acartonada como producto de la sabiduría que dan los años, quiero que mi mente siga tan radiante, brillando y aportando, no quiero dejar de aprender nunca. Que tengas una feliz semana Cornelivs
ResponderEliminarLa forma de evitar que haya infinidad de sitios y lugares sin pisar es hacerlo ahora, antes de que se nos acartone el cuerpo y la mente y no podamos hacerlo.
ResponderEliminarUn beso
¡Eso, Eso! Pues, que esos pies se apuern a pisar por dondo nunca lo han hecho, que es ésta una buena forma de no arrugar la mente.
ResponderEliminarBesos
A veces se acartonan por falta de cariño. Pero la mayoría tienen inquietudes que a veces desconocemos.
ResponderEliminarYo soy una pura arruga, pero solamente en el exterior y no me duele.
La experiencia no siempre se traduce en sabiduría, no sé si porque algunas cabezas pierden fuelle o si son los corazones los que se niegan a entender, a asimilar
ResponderEliminarLa vejez se lleva por fuera pero eso no nos debe influir dentro...un abrazo....
ResponderEliminarEl secreto es aprender, siempre aprender, lo contrario es vegetar y esperar el fin
ResponderEliminarun abrazo
A veces no dá la vida, no da tiempo a hacerlo todo, ni viviendo tres vidas, por eso es importante vivir intensamente cada momento. Un beso
ResponderEliminarHay que llegar a una edad en la que uno se da cuenta de que no sabe nada. Esa es la edad perfecta
ResponderEliminarEn ocasiones, se acartonan y se atrincheran; pero, en otras, las arrugas esconden el mayor tesoro de la vida: el amor y la sabiduría.
ResponderEliminarOjalá sembremos nosotros arrugas de esta última especie.
Un abrazo, querido Cornelivs.
nunca se termina de aprender...
ResponderEliminarme identifique con lo leido :O
ResponderEliminarsaludos :D
hay que dejar que se arrugue el envoltorio al mismo ritmo que se alisa el espíritu.
ResponderEliminarSalu2
Me han venido a la mente muchos vetustos personajes que creen que el acartonamiento es síntoma de sabiduría!...nada más alejado de la realidad!...el ser sabio implica la suficiente apertura mental como para estar siempre en aptitud de aprendizaje, abierto a las innovaciones aunque con el poderoso sustento delas viejas experiencias.Tener arrugada la mente es en cambio síntoma seguro de vetustez.
ResponderEliminarUn abrazo!
Un abrazo!
La humildad nos aligera el peso de las arrugas y los apegos..y nos ayuda a elevarnos,aprendiendo siempre con zapatos nuevos..!!
ResponderEliminarMi gratitud por compartir y mi abrazo inmenso de letras,Cornelivs.
M.Jésús
Que las arrugas estén sólo por fuera.
ResponderEliminarComo no se me actualizaba tu blog, he borrado la otra dirección y añadido la que tú me dejaste en mi blog, a ver ahora qué pasa, ya te diré.
ResponderEliminarLas arrugas son las experiencias de la vida, no tienen por qué ser feas, todo lo contrario.
Un beso.
Nunca se acaba de aprender todo.
ResponderEliminarSiempre hay algo que podamos ver,tocar,oler o sencillamente sentir y saber.
Besos.
Justo ésta entrada me dá pie para comentarte que estoy en un grupo de la tercer edad que se llama APREN, en el que concurre muchas personas de diferentes edades pero la maria 8entre ellos UN SEÑOR DE 92 AÑOS , OTRA SRA.DE 87) Y DONDE JUSTO ESTAMOS ALLÍ PARA APRENDER. Y uno se dá cuenta que no terminaremos nunca de aprender.
ResponderEliminarLa soberbia es siempre una mala dirección a tomar...
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Querido amigo!
ResponderEliminarYa estoy en casa he vueltooo
Un abrazoo saludoss
Y es un gran error, muchas veces vivido!!!
ResponderEliminarTremendo error, es tipo de certezas, que hacen que no estés dispuesto a aprender más, creyendo en tu propio humo
Hay que ser un eterno aprendiz...
Besotesss y lindo finde
Gizz