"Cree a aquellos que buscan la verdad, duda de los que la han encontrado" (André Gide)
"No estoy de acuerdo con lo que dices, pero defendería con mi vida tu derecho a expresarlo" (Voltaire)

"La religión es algo verdadero para los pobres, falso para los sabios y útil para los dirigentes" (Lucio Anneo Séneca)
"Cualquier hombre puede caer en un error, pero solo los necios perseveran en él" (Marco Tulio Cicerón)
"Quien no haya sufrido como yo, que no me de consejos" (Sófocles)
"No juzguéis y no sereis juzgados" (Jesús de Nazaret)
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07/06/2008

Reflexiones III

La famosa crónica novelada conocida como La Biblia, siempre nos ha hablado de un Dios (Yahvé) rencoroso y vengativo, que persigue los pecados de sus autores “hasta la cuarta o sexta generación”, y que enseña que hay que dar ojo por ojo y diente por diente. Parece como si Dios no tuviese otra cosa que hacer que dedicar su tiempo a estar exclusivamente pendiente de nosotros, miserables moléculas, y ademas, experimenta emociones humanas como amor y odio hacia las criaturas que "presuntamente" ha creado. ¡Que honor para nosotros, merecer tanta atencion!

El Nuevo testamento parece que dulcifica algo dicho mensaje, pero no mucho, pues los buenos van al cielo y los malos al infierno. Y dios sigue permanentemente pendiente de nosotros, los pecados siguen siendo castigados con terrible crueldad, leed a Dante Alighieri; parece que no tiene otra cosa que hacer que estar sempiternamente pendiente de lo que hacemos. Un dios rencoroso y vengativo, que tiene emociones humanas, en mi opinion no se merece que lo escriba en mayúsculas; siempre habia creido que dios era otra cosa.

Desde que era pequeño, siempre me he preguntado: ¿tanto valemos, como para que todo un dios no tenga otra cosa que hacer que estar pendiente de nosotros a cada instante? ¿Quien soy yo, simple ser humano, para que todo un ser que se supone infinitamente poderoso y sabio, experimente hacia mi una ira tan grande? ¿No será que todo es un cuento, creado por el orgullo humano, que no acepta que todo lo que tiene principio ha de tener fin? ¿No será que somos tan orgullosos que no aceptamos que hemos de morir un dia, queramos o no?

Yo soy padre, como tantos miles de padres que hay, y perdono a mis hijos. Si hacen alguna trastada, les riño amistosamente, pero nunca los condenaria a un mal permanente. Incluso en el caso de que mis hijos salieran malos ¡al fin y al cabo serian mis hijos, pero no los meteria en la carcel!
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Bien, pues he aquí que el dios de la novela la Biblia, según la iglesia, castiga al infierno por toda la eternidad al que muere en pecado. ¡Vaya ofensa mas grande! Tiene que ser algo terrible esa ofensa, para merecer ir al infierno por toda la eternidad. A mi me parece que este ofendido deberia de leer a Seneca un poco ("El sabio no puede recibir injuria").
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¡Es como si yo impusiera a mi hijo pequeño una pena de prisión consistente en cadena perpetua por haber derramado un simple vaso de zumo! Castigo desproporcionado para la levedad de la falta. Todo me parece muy irreal. No se si dios existe, pero si existe no creo que tenga un animo tan mezquino como nos quieren hacer creer algunos.
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Y más aún, cuando leo en Stephen Hawking que "La estirpe humana no es más que un sustrato químico en un planeta pequeño, orbitando alrededor de una estrella mediana, en los suburbios de una galaxia del centenar de miles de millones de galaxias que existen."
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Me parece que la iglesia sigue pensando que somos el centro del universo. Pobre Galileo... ¡siguen sin creerle!

Aquí hay algo que no cuadra.

Saludos.

3 comentarios:

LoOla dijo...

Como padre coherente que eres tu hijo no tendrá ningún miedo a que por derramar el zumo le lleve a que le impongas una cadena perpetua. Me ha gustado mucho lo que has dicho y cómo lo has dicho. Según la Iglesia yo iré al infierno: soy una niña mala. ¿Y qué? Allí siempre hace calorcito y se huele a barbacoa... y están los cabrones del cuento, los niños malos..., los malos malísimos de las pelis...

¿Dónde está escrito que en el infierno no se puede ser feliz?

Besos brujos!

PABLO JESUS GAMEZ RODRIGUEZ dijo...

Jejeje, y ademas ponen allí unos callos con rioja que ni te digo ná... De acuerdo con mi niña loola.
Besos brujos.

ALAS DE MI LIBERTAD dijo...

Yo sabe lo que te digo amigo, que los buenos van al cielo y los malos a todas partes, creo que la iglesia se ha valido siempre del miedo para que la gente haga lo que ellos quieran, no se si viene al caso pero donde Irán ellos después de lo que hicieron en la inquisición, maravillosa entrada, besos