"Cree a aquellos que buscan la verdad, duda de los que la han encontrado" (André Gide)
"No estoy de acuerdo con lo que dices, pero defendería con mi vida tu derecho a expresarlo" (Voltaire)

"La religión es algo verdadero para los pobres, falso para los sabios y útil para los dirigentes" (Lucio Anneo Séneca)
"Cualquier hombre puede caer en un error, pero solo los necios perseveran en él" (Marco Tulio Cicerón)
"Quien no haya sufrido como yo, que no me de consejos" (Sófocles)
"No juzguéis y no sereis juzgados" (Jesús de Nazaret)
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03/07/2025

Una muy buena pregunta

Tras publicar la entrada de ayer,  y despues del trabajo -ultima hora de la tarde- sostuve una larga y  agradable conversacion telefonica con un compañero mio.  Estuvimos hablando de la impermanencia de las cosas, de que todo pasa y nada es para siempre, en la linea de mis ultimas entradas. Algo de estoicismo, y sobre todo mucho budismo, que como sabemos no es propiamente una religion sino una sabia filosofia practica de la vida,  cuya esencia esta en la exploración de la naturaleza de la mente (conocen la mente mejor que nadie) y en la delgada linea que separa la vida de la muerte, que  no el fin de nada sino una puerta hacia la Luz.  Admiro a los monjes tibetanos y su mensaje. Afortunadamente cada vez calan mas sus enseñanzas en  este occidente  en el que vivimos,  tan avanzado tecnologicamente y tan pobre en valores humanos.  En occidente sabemos que tenemos que tener mucho cuidado con nuestro ego, causa directa de muchos de nuestros sufrimientos; pero estos monjes  tienen unas herramientas muy sabias para anular ese ego,  hacer salir nuestra luz interior, y reposar en la naturaleza pacifica e inmensa de nuestra mente.   


Llevo algun tiempo aprendiendo la doctrina budista, y he comprobado por propia experiencia que  la meditación calma la mente (la lleva de vuelta a casa) y hace que recordemos la luz que somos, dandonos unas sabias herramientas. Animo a todo el mundo a que lo compruebe; y de hecho, cuando he comenzado a practicar la meditación y a seguir algunas de las  enseñanzas budistas he experimentado una paz, un sosiego interior y una alegria de vivir que hacia años que no sentia, asi como nueva fuerza e ilusion para ir superando y afrontando las dificultades cotidianas de la vida. Y me queda mucho por aprender.

A nuestra edad  la vida nos hace madurar, el caparazón del ego va perdiendo resistencia afortunadamente, y vamos eliminando impurezas de nuestra alma  para que su dulzor natural por fin salga a la luz y se vea en nuestros actos, en nuestro corazón y en nuestra mirada.  Le enseñé mi entrada de ayer, se conectó on line, y le echó un rapido vistazo. Ambos sostuvimos la idea de que  tenemos que dejar de confiar en las cosas externas del mundo, y confiar mas en nuestra luz interior; y no quejarnos tanto de lo que el mundo no nos ha dado, sino preocuparnos mas por lo que nosotros podemos hacer por él. Poseer las cosas que tenemos (personas, cosas, situaciones) sin aferramiento, sin aficionarnos demasiado a ellas, dada la brevedad de la vida,  esto es budismo puro,  en esta idea  Séneca y Marco Aurelio  incidian igualmente.

La fortuna es muy mudable y lo que hoy tienes mañana puedes perderlo. Cuando le comenté tal posibilidad, me respondió con esta pregunta:  "¿Y si lo que tenemos, mejor dicho, el aferramiento a lo que tenemos,  es lo que nos impide encontrarnos a nosotros mismos?"

Saludos cordiales.

Pablo J. Gamez Rodriguez.


02/07/2025

¿Que es realmente nuestro?

  Apreciados amigos.

Recordareis el tema de conversación que mantuvimos ayer, nos preguntábamos como es posible que tengamos miedo a perder algo, cuando lo cierto y verdad es que nada en este mundo nos pertenece realmente.  Vivimos convencidos de que poseemos cosas: una casa, una esposa e hijos, nuestro trabajo, incluso creemos que  nuestro cuerpo tambien es nuestro.  Pero, como recuerdan los sabios que nos precedieron, esta idea es una ilusión que nos engaña, pues realmente nada es nuestro, ni las personas que amamos, ni el lugar donde vivimos, ni los bienes que poseemos;  ni siquiera el cuerpo que tenemos, pues éste solo es un prestamo que el universo nos ha hecho por un tiempo limitado, y cuando partamos de aqui,  aqui se quedará, pues devolveremos hasta el último átomo que lo compone. Esta es la visión estoica,  y yo la comparto tambien; el mundo siempre ha confundido lo transitorio con lo eterno, y asi sigue sucediendo hoy. Todo lo que creemos que tenemos realmente  nos ha sido prestado por un tiempo, muy determinado, cuya duración es incierta (no sabemos cuando acabará). Aun así, nos empeñamos en aferrarnos a todo como si fuera eterno, y el miedo a perderlo se convierte en fuente de sufrimiento.   



En cuanto al origen de ese sufrimiento, según Marco Aurelio y Seneca, el dolor surge de esa confusion (lo transitorio/lo eterno) que siempre ha existido en el mundo. Cuando creemos que algo nos pertenece para siempre, la posibilidad de perderlo se vuelve una amenaza constante. Y nada es eterno, lo cual conecta directamente con la impernanencia de todas las cosas (uno de los puntos clave de la sabiduría budista, junto con el de la "atencion plena"). Por si fuera poco, ese sufrimiento se agrava porque tenemos otro miedo mas: el miedo a la muerte, nos cuesta enormente aceptar  que todo lo que tiene principio, tiene fin. 

Estamos muy equivocados. Creemos que vamos a estar para siempre aqui, y que todo va a ser siempre "nuestro", y generación tras generacion seguimos cometiendo ese error.  Por ello, si aceptamos que nada es permanente, que todo (TODO) se acaba, esa angustia podemos convertirla en paz interior.

Pensemos un poco sobre esto.  Os pregunto: ¿Qué es realmente mio? ¿Qué es realmente vuestro?  Los estoicos nos enseñaron a dejar de mirar tanto lo transitorio y centrarnos en lo esencial.  Lo único que verdaderamente es nuestro y que nos pertenece  son nuestro carácter, nuestras elecciones y la paz con la que decidimos afrontar lo que no podemos controlar. “Aquello que te pertenece, nadie puede quitártelo”, explicaban ya los estoicos con firmeza.

Yo creo que este pensamiento es una invitación a reconectar con uno mismo, a dejar de buscar seguridad en lo externo y volcar la atención hacia lo que sí depende de nosotros. La libertad viene a través de la “aceptacion”, que  para mi  es una liberación.   Ahí esta la libertad, núcleo del pensamiento estoico:  “nuestra libertad comienza exactamente en el momento en el que dejamos de luchar contra eso: contra la realidad”.  Las cosas son como son, no como nosotros quisiéramos que fueran. Por eso, aceptar que nada ni nadie nos pertenece no es una resignación ni una rendicion, sino una liberación. Es una forma de reconciliarse con la naturaleza cambiante de la vida y vivir con más ligereza, menos miedo y mayor conexión con el presente.


Dos mil años después, la filosofía estoica  tienen mas vigencia que nunca.  El mensaje de Marco Aurelio, rescatado con claridad y sensibilidad, nos recuerda -al igual que los budistas-,  que realmente no controlamos nada; nosotros vamos por el rio, y creemos que somos nosotros los que marcamos el camino;  y ese es otro error mas, pue el rio nos lleva por donde el quiere, y somos como hojas que arrastra la corriente. Por mucho que nos empeñemos en seguir una determinada dirección, lo cierto y verdad es que no podemos hacer nada ni controlar nada: es la propia corriente de la vida la que nos lleva a nosotros.

Soltar esa ilusión de control no es perder, sino ganar perspectiva y libertad.  ¿Os imagbinais el sufrimiento que nos traeria un miedo a perder las cosas que fuera eterno y que nunca se acabara?  Séneca diría: “Todo es prestado” “nada es realmente tuyo”.  El sabio se prepara para devolverlo todo sin lamento, pues sabe que en realidad no lo poseía en absoluto. Séneca no lo expresa en una única frase exacta, pero estas tres ideas lo comunican de forma radical: el sabio  (I) usa todo como  un préstamo (II) no apalanca su tranquilidad sobre lo efímero de las cosas, y (III) sabe que el miedo nace del apego a las cosas, a las personas  y a las  situaciones.

 Temino con palabras de Marco Aurelio y Seneca: 

Marco AurelioMeditaciones 5.15  “Ninguna de estas cosas debe ser llamada ‘del hombre’, a las que no pertenecen al hombre como tal… Considera que son un préstamo, no algo que te pertenezca en propiedad. Cuando la Fortuna da regalos, en realidad solo los presta, y nadie puede reclamarlos como propios.”

Meditaciones 2.14  “Recuerda que no se pierde otra vida que la que uno vive, ni vive otra que la que pierde… El presente es lo único que tiene, y no puede perderse lo que no se tiene.”

Meditaciones 4.47 / 4.50  “No desprecies la muerte… ¿qué diferencia hay entre quien vive tres días y quien vive tres generaciones?”

Meditaciones 7.27 “No sueñes con lo que no tienes; más bien considera lo que tienes como tus mayores bendiciones, y piensa cuánto las echas de menos si no las tuvieras… pero sin valorarlas tanto que te remuevan si las pierdes.”

Meditaciones 9.32–33 / 9.35–36 “Todo lo que ves perecerá pronto… La pérdida no es otra cosa que cambio, y la naturaleza universal gusta del cambio; de ella procede todo lo que es.”

Seneca:

Es más soportable no haber poseído jamás nada que haberlo perdido… el pobre es más alegre que el rico, porque la pobreza no tiene nada que perder.”

“El sabio considera chatarra todo lo que la Fortuna pueda arrebatarle; lo vive como prestado, dispuesto a devolverlo alegremente cuando se lo reclamen… vive como si todo le fuera prestado.”

"Lo que se tiene puede arrebatársenos, pero lo que ya se ha disfrutado, nunca. (…) Todo lo que tenemos puede perderse… Limita tus deseos y así curarás tus temores.”

"Deja de esperar y dejarás de temer.’ Esperanza y miedo son hermanos; el miedo sigue a la esperanza… enviamos la mente al futuro y así distribuimos sufrimientos.” Lo dado también puede ser quitado.”

“Algunos viven ansiosos, porque temen perder lo que les da alegría. (…) Nada que venga del azar es estable; cuanto más alto está, más propenso a caer.”

"¿Y por qué incluso sus alegrías están llenas de ansiedad y temor? Porque no se basan en causas firmes, sino que se agitan tan sin fundamento como surgieron. ¿Y qué clase de tiempos crees tú que serán aquellos que ellos mismos reconocen como miserables, si incluso las alegrías que los exaltan y elevan por encima de los demás no son en absoluto puras?

"Todos los mayores bienes son fuente de inquietud, y nunca se debe confiar menos en la fortuna que cuando parece más favorable. Para conservar la prosperidad, se necesita aún más prosperidad, y por cada deseo que se ha cumplido, es necesario elevar nuevos ruegos.

"Todo lo que nos llega por azar es inestable, y cuanto más alto asciende, más propenso está a caer.

"Además, lo que está destinado a perecer no puede brindar verdadero placer a nadie. Por tanto, es muy desdichada —y no solo breve— la vida de aquellos que trabajan arduamente para conseguir lo que deberán esforzarse aún más por conservar.

"Con gran fatiga alcanzan lo que desean, y con ansiedad mantienen lo que han alcanzado; mientras tanto, no prestan atención al tiempo, ese que nunca volverá.

"Nuevas ocupaciones reemplazan a las antiguas, la esperanza da paso a nuevas esperanzas, la ambición conduce a nuevas ambiciones…"

Que esteis bien.  

Y por cierto, muchísimas gracias por estar siempre ahi, y por esos caracoles y esas manitas de cordero... estaban deliciosas.

Saludos cordiales.

Pablo Jesus Gamez Rodriguez.

18/06/2025

El mejor consejo que puedo darte

Mi consejo es que este verano, siempre que puedas, nades contra corriente y me explico: no sigas la senda de la mayoría, no busques fuera de ti, sino dentro de ti; no busques fuera de ti  cosas como dinero, poder,  belleza, fama, éxito, y demás cosas efímeras y caducas que el tiempo se lleva. Mas bien busca  las respuestas dentro de ti, quiérete a ti misma un poco, y veras como te encuentras con una muy grata sorpresa que, poco a poco, irás descubriendo.


Mira, para este verano yo te voy a proponer que hagamos un viaje por el mundo de la filosofía, vamos a ir nada mas y nada menos que a la antigua Roma, donde -estoy seguro de ello- te vas a deleitar con las inmortales obras que escribió un autentico e inolvidable genio, cuyo nombre completo era  Lucio Anneo Séneca,  y  que es recordado como uno  de los  mayores filósofos estoicos que Roma dio al mundo, este inmortal cordobés (si, nació en Cordoba, en la entonces Hispania)  murió  en Roma en el año 65 d.C., hace justo ahora 1.960 años. Sin embargo, el milagro es que sus palabras permanecen actuales en el tiempo. 

En ningun sitio encontraras mejores consejos que en las obras de Séneca, y precisamente ese es el mejor consejo que te puedo dar: que leas sus obras.  Lee, relee, medita, piensa y repiensa sus sabias palabras: son una luz en medio de la oscuridad de la vida.  Sois muy jovenes, teneis toda la vida por delante, y ahora el mundo es otro: estan de moda los "influencers", las redes sociales y demas  galerias de personajes de este tipo, se prefiere una vana conversacion antes que cultivar la riqueza interior; y hasta parece que nos da miedo estar a solas con nosotros mismos, de modo que esto quizas os parezca muy extraño, pero fijaros, despues de dos mil años la gente sigue leyendo a Seneca: ¿Por que? Pues por algo será, y os invito a que lo descubrais por vosotros mismos.  Quizás hayais pensado muchas veces que la vida es injusta, que es una tragedia que pasen cosas malas a las personas buenas, y que si Dios existiera no permitiria mas de cuatro cosas. Si, y no solo vosotros lo ha pensado: todos alguna vez hemos pensado eso y de hecho Seneca ya lo hizo. Con él hallareis consuelo, todo el que lo lee es como el que navega en la oscuridad de la noche y encuentra la luz  que lo guia. 

¿No me crees? ¡Compruebalo por ti mism@! Por ejemplo, si lees “De la divina providencia”,  te encontraras párrafos como estos:

“¿Por qué el destino acosa a los buenos con dificultades? Porque es propio del buen general enviar a los soldados valientes a las misiones más arriesgadas. Los cuerpos fuertes aceptan el trabajo; los débiles, se quejan. El sabio se alegra de los desafíos, y aun en medio de los peligros exclama: '¿Era esto todo?'.”

“No te equivoques: los dioses tratan con mayor severidad a quienes aman. Les forjan con trabajos, los ejercitan con dificultades, los preparan para sí.”

“¿Crees que los dioses se comportan mal contigo porque te dan la oportunidad de mostrar de qué estás hecho?”

“¿Por qué sufren los buenos? Porque no han aprendido aún a ser verdaderamente buenos si no se prueban en la adversidad. Piensas que es injusto que los hombres justos padezcan. Pero observa cuánto ganan en fuerza de alma, cuánto en grandeza, cuánto en firmeza. Nadie puede conocerse a sí mismo sin haber sido puesto a prueba.”

“¿Crees que alguien sería valiente sin peligro, generoso sin necesidad, paciente sin dolor? Dios trata con rigor a los buenos: los endurece, los hace suyos. Aquellos a quienes ama de verdad, los forma con el hierro del sufrimiento, como se forja una espada: se la golpea, se la dobla, se la calienta, se la templa. Así se hace fuerte.”

“Tú, que te quejas de tu destino, ¿no entiendes que no has sido abandonado, sino distinguido? El sabio acepta lo que viene y no se lamenta. Si es pobre, lo lleva con dignidad. Si sufre, lo convierte en virtud. Si muere, lo hace con serenidad. Porque sabe que nada le puede ser quitado realmente mientras conserve su espíritu recto.”

Si te cansas de esta temática, puedes leer obro libro suyo, titulado “De la vida feliz”, donde te encontraras perlas como estas:

“Todos los hombres, hermano Galión, quieren vivir felizmente, pero andan a ciegas cuando se trata de saber qué es eso que buscan. No es fácil alcanzar la vida feliz si no se sabe dónde está. Quien camina sin saber el camino, más se aleja cuanto más deprisa avanza.”

“Así pues, lo primero que debemos establecer es en qué consiste la vida feliz. A mi juicio, consiste en la paz de ánimo, en la firmeza del juicio, en la elevación del espíritu que sabe valorar todo según su verdadero mérito. La felicidad no proviene del azar, ni de los bienes exteriores, sino de una vida conforme a la virtud.”

“Virtud es vivir en conformidad con la razón. Ser virtuoso es ser libre, dueño de sí mismo, valiente frente a la adversidad, generoso en la prosperidad, y justo en todo momento. Virtud es no temer a la muerte, no dejarse dominar por los placeres, no desear lo que no depende de uno.”

“¿Quieres saber quién es verdaderamente feliz? Aquel que no se deja esclavizar por ningún deseo, que se ríe del miedo, que no se abruma con las penas, que no se exalta con los éxitos, y que mantiene su alma en equilibrio, como un templo inviolable.”

“Muchos buscan la felicidad en los placeres del cuerpo, en el lujo, en el reconocimiento público. Pero esos placeres son fugaces, y pronto se vuelven cadenas. El placer no es un guía fiable: se arrastra, no conduce. La virtud, en cambio, camina con firmeza, sin mirar atrás, sin depender de nadie.”

“No niego que el placer pueda acompañar al sabio, como la sombra acompaña al cuerpo; pero no es su objetivo. La vida feliz no consiste en buscar el placer, sino en despreciar la necesidad de él.”

“El sabio prefiere ser bueno antes que parecerlo. Vive conforme a su conciencia, no al juicio de los demás. Su gozo está en su interior, no en lo que el mundo aplaude.”

“Así pues, si quieres ser feliz, desprecia lo que muchos desean, y cultiva lo que pocos valoran: la rectitud de alma, la independencia interior, la armonía contigo mismo.”

Quizas llegue un momento en el que notes que tu animo está intranquilo o con algo de ansiedad, o que estas preocupada por cualquier otra cuestion que te aflige. Quizás notes consuelo con estas palabras de otro libro suyo, y fíjate que titulo tiene: “De la tranquilidad del animo”. Aquí Séneca nos invita a emprender un viaje hacia el interior de nosotros mismos, donde reside la verdadera fuente de serenidad. Lejos de buscar la paz en la riqueza, los honores o los placeres efímeros, el sabio debe cultivar una estabilidad interna que no dependa de los vaivenes del destino ni de las opiniones ajenas. La tranquilidad del alma, según Séneca, nace de la vida racional, del dominio de las pasiones, y de una aceptación serena de aquello que no podemos cambiar. 

Frente a las inquietudes, la tristeza o la inconstancia que a menudo atormentan el ánimo humano, la filosofía aparece como un remedio capaz de guiar al espíritu hacia la armonía. No se trata de aislarse del mundo, sino de aprender a vivir en él sin ser arrastrado por su ruido ni por sus exigencias. Así, quien actúa con moderación, cultiva la virtud y se contenta con lo que la razón le dicta, alcanza esa rara pero profunda paz que no necesita de aplausos externos, porque nace de una conciencia en calma y de un alma que se basta a sí misma. Mira sus palabras:

“Nada hay más hermoso ni más agradable para el hombre que una mente tranquila y apacible, libre de pasiones violentas y de turbaciones. Porque el alma que no se altera, que no se inquieta por los azares de la fortuna ni por las desgracias que la alcanzan, esa alma es verdaderamente libre y dueña de sí misma. De nada debe temer, porque todo lo que sucede, sucede conforme a la razón del universo, y lo que nos parece adverso, forma parte del orden natural de las cosas. No es la fortuna ni la circunstancia la que perturba nuestra paz, sino el juicio que hacemos sobre ellas. Por eso, la sabiduría consiste en aprender a distinguir lo que depende de nosotros y lo que no, y a no dejar que las cosas externas gobiernen nuestra tranquilidad interior.”

"Es absurdo perturbarse por lo que no está en nuestro poder y dejarse llevar por la cólera, el miedo o la tristeza. Pues ninguna de estas pasiones mejora la situación, sino que únicamente nos roba la serenidad. La verdadera libertad reside en mantener la calma del alma frente a la adversidad, sin permitir que los acontecimientos externos la desvíen de su curso. Por eso, es propio del sabio aprender a dominar sus juicios y deseos, reconociendo que muchas veces sufrimos no por lo que sucede, sino por la interpretación que hacemos de ello."

"No es la fortuna ni la adversidad lo que hace que el ánimo se turbe, sino el modo en que la mente juzga los acontecimientos. Porque todo lo que sucede está sometido a la razón universal, y nada ocurre sin un orden determinado. El sabio, por tanto, no se deja arrastrar por la cólera ni la tristeza ante las desgracias, sino que las acepta con serenidad, comprendiendo que son parte del curso natural de la vida. La mente apacible es aquella que, sin ser insensible, no se deja dominar por las pasiones ni por los deseos desmedidos. Esta tranquilidad es la verdadera libertad, pues quien la posee no depende de nada externo para su felicidad. El camino para alcanzarla es la filosofía, que enseña a distinguir lo que está en nuestro poder —como nuestros juicios, deseos y aversiones— de lo que no lo está, como las opiniones ajenas, la fama o la riqueza. En esto consiste la verdadera fortaleza: en aprender a vivir conforme a la razón, manteniendo el equilibrio del alma ante cualquier circunstancia."

Y para cuando vayas cumpliendo mas años, te daras cuenta de que la vida es muy breve. Notaras que los días y las semanas pasan mas rápidamente de lo que tu quisieras. Bueno, aquí encontraras consuelo: en su libro “De la brevedad de la vida”.  El mensaje esencial de De la brevedad de la vida de Séneca es que la vida es suficientemente larga si se sabe aprovechar bien el tiempo, pero la mayoría de las personas la desperdician en ocupaciones inútiles, distracciones y preocupaciones banales. Séneca sostiene que no es que la vida sea corta, sino que no sabemos vivirla con conciencia y sabiduría. Por eso, recomienda vivir de forma reflexiva, centrarse en el presente y dedicar el tiempo a cultivar el alma y la mente, para así alcanzar una existencia plena y significativa.

Séneca comienza señalando que la vida no es realmente corta, sino que muchas personas sienten que no les alcanza el tiempo porque lo malgastan. La mayoría viven como si fueran a vivir para siempre, desperdiciando sus días en actividades triviales, preocupaciones innecesarias y en buscar placeres efímeros. Otros, en cambio, se dedican a la ambición desmedida, al poder o a la fama, olvidando que todo eso no llena el alma ni da verdadera felicidad.

El filósofo insiste en que solo aquellos que viven con atención, con conciencia de la brevedad y finitud de la vida, pueden realmente disfrutarla. La vida debe ser empleada en la reflexión, en la filosofía y en el cultivo interior, en lugar de dejarse arrastrar por el ruido y la prisa del mundo.

Para Séneca, el tiempo es el recurso más valioso que poseemos, y perderlo es equivalente a perder la vida. Por eso, la clave está en aprovechar el presente, vivir el momento con intensidad y propósito, y no aplazar lo importante para un futuro incierto.

En resumen: no es que la vida sea corta, sino que la mayoría no la vive bien; vivir plenamente es saber administrar el tiempo con sabiduría y dedicación a lo que realmente importa.

Veamos sus palabras:

“No es que la vida sea corta, sino que nosotros perdemos mucho tiempo. La vida es lo suficientemente larga, y una cantidad generosa se nos ha otorgado para la realización de las cosas más grandes, si toda ella se empleara bien. Pero cuando la vida se malgasta en cuidados inútiles, cuando no se dedica tiempo a sí mismo, cuando no se hace nada propio sino que se busca en otras personas, cuando se pierden años en la vana esperanza del futuro y se dilapidan los momentos en la pereza, al final llega la muerte y nos encontramos sin haber vivido realmente.”

“Es verdad que la vida nos es concedida en propiedad, pero vivimos como si solo fuéramos sus arrendatarios, o peor aún, como si la hubiéramos tomado prestada para devolverla sin haberla disfrutado. Todo el tiempo que no se dedica a uno mismo, que no se consagra al cultivo del alma, es tiempo robado y perdido. Y sin embargo, la mayoría prefieren vivir bajo la tiranía de ocupaciones ajenas, esclavos de la rutina, entregados a los caprichos de otros, y se quejan luego de que la vida se les escapa.”

“Quienes no tienen tiempo para sí mismos son esclavos. No es que tengan poco tiempo, sino que pierden mucho. La vida se nos ha dado en plenitud, pero la malgastamos. ¿Qué es más injusto que quejarnos de la brevedad de la vida cuando nosotros mismos la acortamos con nuestra negligencia?”

“Ninguna persona es rica en tiempo, pero muchos son pobres en uso del tiempo. La mayoría pasan la vida como si tuvieran una cantidad infinita, y sin embargo, el tiempo que más se desperdicia es aquel que creemos tener en abundancia.”

“Dedica tiempo a tu propia formación, a tu alma y a la reflexión. Porque vivir sin filosofar es estar siempre a mitad de camino hacia la verdadera vida. Sólo quien aprende a valorarse y a cultivar su mente vive realmente.”

Hay otra joya de Séneca: sus "Cartas a Lucilio". Pero esta inmensa o grandiosa obra, merece comentario en otra entrada.

En resumen, a mi modo de ver  la paz espiritual que todo ser humano busca,  es como un edificio con tres columnas fundamentales; una de ellas es el estoicismo de Seneca y de Marco Aurelio; la otra columna es la sabiduria milenaria del budismo tibetano -maravilloso, otro dia hablarmos de esto si quieres-; y la tercera, como no, antes ahora y siempre, el mensaje original de Jesus de Nazaret; pero el mensaje original, no el mensaje trastocado e institucionalizado que proviene del Concilio de Nicea desde el año 325: hablo del mensaje primitivo y original de Jesús. 

Son tres solumnas, pero el edificio es el mismo: un unico y mismo conjunto de pensamiento.

Pero por hoy ya es bastante.  Sal, tomate unas cervezas y pasatelo bien.

Un abrazo y hasta pronto.

Pablo J. Gamez Rodriguez.

17/06/2025

Si vas de viaje...

 ...no estaria de mas que escucharas estos sabios consejos:

"Cometemos un error, Lucilio, al creer que cambiando de lugar cambiaremos de espíritu. El alma enferma lleva sus males consigo. Correr de un sitio a otro no cura la inquietud interior, sino que la alimenta. Hay que buscar la tranquilidad no en otros paisajes, sino en el interior de uno mismo."

"La vida agitada, llena de ocupaciones frenéticas, impide el reposo del alma. Pero también es dañino el ocio vacío, ese tiempo libre sin provecho. El remedio está en una ocupación equilibrada, como el estudio de la filosofía, que nos mantiene despiertos sin agotarnos y nos prepara para cualquier situación."

"La verdadera tranquilidad no consiste en estar lejos del ruido, sino en ser invulnerable a él. El alma firme no se turba ni con el bullicio del foro ni con el silencio del campo."

"Aquel que vive conforme a la razón, que se contenta con poco, que no desea lo que está fuera de su control y acepta lo que el destino le envía, ése alcanza la serenidad. Porque la paz no viene de cambiar el mundo, sino de ajustar nuestras expectativas a la naturaleza de las cosas."

(Séneca, Epistolas a Lucilio)

Saludos

Pablo J. Gamez Rodriguez

01/05/2025

BUSCANDO LA ALEGRIA DE VIVIR


Vivimos en un mundo tecnologicamente muy avanzado pero, paradójicamente, muy atrasado espiritualmente. En esta frenética sociedad de la información ultrarápida e instantánea, veo que el ser humano vive mas cómodamente que nunca porque lo tenemos todo, sin embargo  la pregunta es: ¿somos  mas felices que antes? Y la respueta que me surge es un rotundo NO. Hablando en general, y sálvese quien pueda,  estamos muy desorientados. Dirigimos nuestra atención hacia afuera, hacia la comodidad, hacia los bienes materiales, hacia lo superficial y  lo rápido; buscamos los “likes” rapidos y mientras mas mejor; si tienes mil o cinco mil “likes” crees que eres alguien, y si no piensas que no eres nadie. Vivimos pendientes del parecer ajeno, de los “influencers” y de la inmensa galeria de mercachifles y toreros de salón que hay por ahi; y no nos damos cuenta de que hemos esclavizado nuestra propia felicidad: la hacemos depender de los demás. 

Nos quedamos en la forma de las cosas y no penetramos en el fondo. Y lo que es peor: no nos damos cuenta de que lo mas precioso que tenemos no hay que buscarlo fuera: está ya dentro de nosotros, lo que pasa es, eso,  que hay que buscarlo. Y mucha, muchísima gente, tristemente, llega al final de su vida  sin darse cuenta.

¿Y que es eso que tenemos dentro? Te animo a que lo descubras por ti mismo/a. Si dejas de dirigir tu atención hacia el exterior continuamente, buscando la aprobación externa, y la diriges hacia tu interior, puede que te lleves una inmensa sorpresa.  Puedes descubrir muchas cosas.

Por ejemplo, puede que un buen dia te des cuenta de que el mero hecho de estar vivo ya es, por si mismo, un auténtico regalo,  un regalazo. Se nos ha dado todo sin pedir nada a cambio.  No hemos pagado nada por estar aquí, todos los días abrimos los ojos gratis. Nacemos, respiramos, andamos, nos sentamos, corremos, comemos, bebemos, hacemos el amor, dormimos, disfrutamos: estamos aquí. En resumen: el Universo nos ha creado,  gratis, y para mi eso es la máxima manifestación del amor de Dios (llamalo, si lo prefieres,  “Energía Creadora”)  hacia sus criaturas, como nosotros.

Yo pienso que la vida es maravillosa, pero tiene un problema que nos impide disfrutar de ella: nuestro ego.  Nuestros padres, abuelos, y anteriores generaciones, podrían alegar su ignorancia como excusa,  pues la alfabetización completa de la sociedad solo llegó a España  en el Siglo XX, en definitiva, ellos NO eran responsables.

Sin embargo, nosotros no podemos alegar ninguna ignorancia porque tenemos el móvil en las manos, tenemos el mundo de la información en nuestras manos; y si no hacemos uso de esa magnifica oportunidad para aprender cosas nuevas y evolucionar como seres humanos, o hacemos un mal uso de ese conocimiento y de internet, los únicos responsables seremos nosotros, y solamente nosotros.  

Por tanto, si  buscas en internet un poquito, te darás cuenta y descubrirás  que la felicidad humana no termina de llegar porque hay un enemigo suelto desde hace miles de años, que se encarga de hacernos desgraciados: nuestro  ego, el cual es definido por la mayoría de los autores como la construcción mental que hacemos -en nuestra mente- de nosotros mismos, esto es, una identidad que nosotros mismos nos forjamos y que basamos en nuestros pensamientos, recuerdos, roles sociales, creencias, logros, fracasos y etiquetas como “yo soy esto” o “yo no soy aquello”.  Es decir, es  el “yo” que creemos ser, pero que en realidad no somos en esencia. Es una especie de personaje, una careta o un disfraz que nos creamos para movernos por el escenario del mundo, y  que muchas veces, por desgracia,  se apodera de toda nuestra conciencia.

Nuestro ego nos quita la alegría de vivir porque nos desconecta de la realidad tal como es y de nosotros mismos en nuestro estado más auténtico.

Y es que el ego es terrible,  he aquí alguna de su fechorías: busca validación externa de modo constante, el ego necesita ser aprobado, admirado, reconocido (y esto nos mantiene atados a la opinión de los demás y nos hace vivir en función de expectativas externas, lo que genera ansiedad y frustración); además, siempre se apega a la imagen del “yo”, pues el ego construye una identidad rígida: "yo soy exitoso", "yo soy fracasado", "yo soy diferente", etc, con lo cual defender esa imagen consume mucha energía y genera sufrimiento cuando la realidad no encaja con ese ideal; además, nos hace competir en lugar de conectar, pues el ego compara, juzga, envidia, y en vez de disfrutar el presente o celebrar a otros, siempre está viendo quién tiene más, quién vale más, lo cual  bloquea la empatía y la gratitud. Por si fuera poco, el Ego reacciona desde el miedo y la carencia, el ego teme perder lo que tiene o no obtener lo que desea, y vive en un modo de defensa o ataque, lo que impide sentir paz y gozo interior. Por si fuera poco, y no contento con esto, el ego nos desconecta del presente, siempre está en el pasado (culpa, rencor) o en el futuro (ansiedad, expectativas).  

Que se lo pregunten a mi admirado Séneca, que en su tatado De la tranquilidad del alma" (De tranquillitate animi), ya decía que los animales salvajes, cuando no están siendo perseguidos, disfrutan de una paz natural y estan tranquilos,  mientras que los seres humanos, incluso en ausencia de peligros inmediatos, se perturban a sí mismos con recuerdos del pasado y temores sobre el futuro.

El ego NO tiene en cuenta, ni sabe, que la alegría de vivir solo se encuentra en el aquí y ahora.  Estar aqui y ahora, plenamente presentes. ¿Te duele algo ahora mismo? No. ¿Tienes todo lo que necesitas ahora mismo? Si. Entonces, ¿cual es nuestro problema ahora mismo?  No mañana ni pasado, ¡ahora mismo ¿cual es tu problema?!  Ninguno ¿verdad? ¿Entonces, por que no disfrutamos mas de las pequeñas cosas que la vida nos regala  a cada instante,  como p. ej., el placer de comerse un buen plato de manitas  o unos esparragos trigueros con unos buenos amigos  bebiendo un buen vino, o dar un paseo por la playa, o hacer deporte,  o ver una buena pelicula, o mil ejemplos más como estos?

Y soltar el ego no significa dejar de tener identidad, sino liberarnos del sufrimiento.  

Por ejemplo, podríamos empezar  preguntándonos cada dia varias veces: ¿Quién soy yo? Diras: yo me llamo fulano/a de copas, vivo en la calle tal, de tal ciudad, mi profesión es tal y cual, tengo esposo/a y tantos hijos. Bueno, esa es tu etiqueta externa o tu disfraz social, pero no eres tu. Despójate de todo eso que crees ser y piensa: aparte de eso, ¿Quién soy yo realmente, quien soy yo de verdad? ¿Quién más vive dentro de mi?

Comprobaríamos que al  dejar de identificarnos con lo que no somos realmente,  regresan la paz, la autenticidad y una alegría que no depende de las circunstancias.

Los estoicos y los budistas aconsejan superar nuestro ego de varias maneras: primeramente, observándonos sin juzgarnos. La conciencia es el antídoto del ego. Cuando observas tus pensamientos, emociones y reacciones sin juzgarte, creas una distancia entre “tú” y el ego. Ejemplo: en vez de decir “soy una persona impaciente”, dices “hay impaciencia en mí ahora”. En segundo lugar,  practicar la presencia con atención plena. Dado que el ego vive en el pasado o el futuro, el presente lo desarma. Cuanto más presentes estamos (con la atención puesta en lo que hacemos, sin distracción), menos poder tiene el ego. Una buena práctica seria hacer cualquier tarea al dia,  con plena atención, sin prisa, concentrados en lo que estamos haciendo. En tercer lugar, cultivar la humildad y la gratitud, y ojo,  porque la humildad no es pensar menos de ti, sino pensar menos en ti.  En cuarto lugar: aceptar las cosas como son. Hay que aceptar lo que es, como es. El ego lucha contra la realidad: quiere que las cosas sean como él desea. Trascenderlo implica aceptar las cosas como son, sin resignación, pero sin resistencia mental. En quinto lugar, hay que conectar con algo mas grande que nosotros. Y es que el  ego se cree el centro del universo. Sentirnos parte de algo más amplio (la naturaleza, una comunidad, la conciencia universal) lo relativiza, con lo cual quizás sea bueno dedicar  tiempo a actividades que nos conecten con lo sagrado, lo natural o lo colectivo: estar en la naturaleza, ayudar a otros, practicar silencio, arte o espiritualidad. Y en sexto y ultimo lugar, aceptar nuestros defectos. El ego es soberbio y orgulloso y suele rechazar las partes de ti que no encajan en su “imagen perfecta”, por lo cual solo integrando tu sombra (tus miedos, defectos, heridas) puedes liberarte de su control. P. ej., podemos hacer una lista de cosas que criticamos en los demás, y preguntarnos: “¿Esto existe también en mí?”  

Superar el ego es un arduo trabajo, es un camino de conciencia, que puede durar toda una vida, y no es una meta que se alcanza de una vez, sino progresivamente. Cada paso que damos en esa dirección nos trae mas paz, libertad y verdadera alegría.

Podríamos dejar un rato el móvil y pensar más en estas cosas, pero, claro, necesitamos tiempo. Y ese es el problema, que no tenemos tiempo. ¿No tenemos, o es la excusa que nos buscamos? Porque si algo nos interesa de verdad, si que encontramos tiempo.

 Yo, desde luego, llevo años inmerso en un proceso de completa demolición de mi propio ego, y cada ladrillo que tiro al suelo, me da más felicidad.  Por eso mi consejo es: no tengas miedo a perder tu ego.  ¡¡¡Animo!!!  Es falso que no puedas vivir sin tu ego:  lo real y verdaderamente correcto es todo lo contrario;  se puede vivir perfectísimamente sin él, y  de hecho seremos mucho  mas felices de lo que lo somos ahora.

 ¿Tienes dudas? Esto es bueno. Busca entonces, analiza, investiga, teclea en Google o en cualquier buscador, o en Chat GPT, Youtube, Wikipedia, etc,  información sobre el Ego y como  superarlo; estudia a autores como Séneca, Marco Aurelio; y mas contemporáneos, los maestros espirituales tibetanos  -magnificos- como Jamyang Khyentse Chökyi Lodrö, Nyoshul Khenpo, Dudjom Rimpoché, Dilgo Khyentse Rimpoché,  el propio Dalai Lama y tantos y tantos otros; grandes comunicadores como Mario Alonso Puig o Manuel Sans Segarra, a los que admiro, y que con sus conferencias y sus libros están haciendo una magnífica labor de difusión y concienciación social -te animo a que los sigas-;  de todos ellos he tomado ideas en las que me he basado para la elaboración de esta entrada.  

 Permíteme que termine haciéndote una pregunta. Estamos hartos de comer, y de beber. Lo tenemos todo. Y sin embargo, parece que no terminamos de ser felices del todo, es como si no sintiéramos vacíos por dentro. En muchas ocasiones, el personaje que crees ser (tu identidad social, tu etiqueta, tu ego) ha conseguido hoy lo que queria, en el trabajo, en la casa, donde sea. Te sientes completo, pero dura poco esa felicidad, porque pronto vuelve esa sensacion de soledad y de vacio. ¿No has tenido esa sensación?  ¿Si? Entonces  ¿Por qué no buscamos algo más? ¿No sera que el Ser interior que habita dentro de ti esta llamando tu atencion? Si lo tienes todo y has conseguido tus objetivos, ¿porque no terminas de ser feliz al 100 %, que mas quieres, que mas necesitas?  Y,  ¿por que no miramos un poco mas hacia nuestro interior y no hacia fuera? 

La respueta, como siempre, la tienen los sabios que nos precedieron, muchos de los cuales ya he nombrado antes, y como no, nuestro  Jesus de Nazaret: No solo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios."  Y si quieres otro ejemplo, Séneca (lee la epístola 17 a Lucilio, si no me crees) dijo lo mismo con otras palabras; también vió que merecia la pena seguir la senda de la iluminación espiritual:  "Cuánto mejor lo que aquí se promete: ¡la libertad perpetua y no vernos obligados a obedecer a ningún dios ni a ningún hombre! Hemos de alcanzar esta meta, aunque sea pasando hambre."

¿Te animas?  ¡Es una busqueda apasionante...!

Saludos.

Pablo J. Gámez Rodriguez.

18/04/2025

UNA ORACION DEL S. XXI



Tengo sesenta años cumplidos, y  he acumulado el bagaje experiencial propio de la edad. No obstante, sigo aprendiendo cosas cada día,  mantengo vivo mi interes y mi curiosidad, y afortunadamente aún no he perdido mi capacidad de asombro.  Eso si, mientras más cosas aprendo, más me doy cuenta de lo poquito que sabemos y de lo inmenso que es el Saber.  Como decía Aristóteles, “cuanto mas sabes, mas te das cuenta de que no sabes”.

Hablemos del mundo del Espiritu. Entre los numerosos maestros que me han enseñado a avanzar por la dificil pero gratificante senda de la espiritualidad humana  figuran  primordialmente mis estoicos (Séneca,  Marco Aurelio y Epicteto) asi como los maestros Lama tibetanos; y como no,  ayer, hoy y siempre  Jesus de Nazaret.

Por ello tras más de veinte años leyendo y releyendo en mis ratos libres a todos estos sabios, y tras meditar y remeditar sus enseñanzas, he compuesto la ORACION que vas a leer y que transcribo al final.  Me apresuro a indicar que es una oración  muy personal   que  llevaba gestándose dentro de mi algun tiempo y que me atreví a poner por escrito hace ya algunos dias. Es una peticion que formulo al Padre Universal, Creador de todas las cosas, o si lo preferís, a esa Energia Universal que es la causa-centro-primera de todo lo creado. Llamadlo como queráis.  Tiene influencias de todas esas corrientes de pensamiento.  

Como apreciareis,  he procurado darle un toque personal, por eso hablo en primera persona, la he enfocado como un coloquio directo que sostengo con mi/nuestro Padre Universal.  Y lo llamo "Padre" con la intencion de sentir su cercania, como Jesús, que llamaba a su Padre como "Abba" (se podria traducir, segun muchos autores, por el popular término "Papá"). ¿Razon de su publicacion?  Muy sencilla: ayudar a quien quiera tener alguno tipo de contacto con lo Trascendente. Y aunque el coloquio con Dios es algo muy personal de cada uno,  aqui está el mio, y lo publico con la mejor de mis intenciones,  a fin de que os pueda servir y ayudar como a mi, sin perjuicio de que cada persona pueda personalizar su propia oración. 

¿Por que? Porque estoy firmemente convencido de que todos los seres humanos de este mundo, sin distinción de raza, somos hermanos y que el mundo es una aldea global, las fronteras solo son eso, una línea imaginaria en el mapa. Todos nacemos y morimos del mismo modo, y sentimos las mismas necesidades, no solo materiales, sino espirituales.  Séneca dijo en uno de sus textos que su patria era el mundo entero. Yo, dos mil años después, tambien lo pienso. 

Además, porque entiendo también que no solo es válida como oración, sino también como un ejercicio de autoafirmación personal ante la locura de este mundo frenético en el que vivimos, en un intento por traer a nuestras vidas lucidez, serenidad y paz mental y emocional: merece la pena, ya lo creo,  emprender el camino en busqueda de la paz mental y emocional.  Blaise Pascal, un autentico genio matemático y filosófico, ya lo advirtió  en 1.670, cuando escribió que "la infelicidad del hombre se basa solo en una cosa: que es incapaz de quedarse quieto en su habitación".  Ya entonces llevaba razón, y creo que ahora aun más. 

Y es que en esta sociedad que -por desgracia- no puede vivir  sin móvil y en la que todos parecemos huir de la soledad y, lo que es peor, de nosotros mismos, es un  gran logro dejar de mirar hacia el exterior, y comenzar la apasionante busqueda personal del auténtico y genuino  Tesoro -lo escribo con mayúscula-  que todos tenemos muy dentro de nosotros y que los grandes sabios que nos precedieron supieron vislumbrar.  

Gran búsqueda esa, ya lo creo. ¡Animo, merece la pena!  "Pedid y rercibireis, llamad y se os abrirá, buscad y encontrareis", dijo Jesús. Apaguemos un rato el movil y demonos un paseo por ahi, en soledad, o bien hagamos un poco de Meditación, Yoga, Mindfulness, o similares.  ¡Al menos podremos encontrarnos con nosotros mismos! Vivimos en medio de millones de estimulos con la atencion siempre hacia fuera,  lo cual creo que es un error; pues, sin olvidar que el ser humano es un ser social, obviamente, creo que de vez en cuando debemos de mirar tambien hacia nosotros mismos, hacia adentro; a ver si somos capaces de quedarnos quietos en nuestra habitacion un buen rato, contrariamente a lo que decia  Baise Pascal. 

En todo caso, reivindico el placer de una buena conversacion sobre estos temas, como las que he tenido ultimamente con mi  buen amigo F.H., con el cual he comentado algunas ideas de esta Oración, y que me ha aportado sus puntos de vista.

Mi oracion dice asi:
ORACION

"A Ti, Padre, creador de todos los Universos, de todo lo visible e invisible y de todo lo que en ellos se contiene.

Envíame tu Reino, el Reino de tu Luz y de tu Espíritu. Abre mi mente y mi visión del mundo y hazme capaz de captar las realidades espirituales que existen mas allá de nuestra corta y miope percepción sensorial.

Dame tu luz y purifica mi cuerpo, mi corazón, mis palabras, obras y pensamientos; conviérteme en un Ser lleno de tu luz.  Bendice mi vida y purifica y limpia mi mente de todos sus prejuicios e impurezas, para que sea capaz de comprender y apreciar quienes somos de verdad, y no lo que este loco mundo consumista quiere que creamos que somos.

Dame tu serenidad; concédele la Paz a mi mente y a mi espíritu, líbrame   de toda perturbación interior, y dame fuerza para afrontar las dificultades de la vida.

Cumplase siempre tu voluntad, y dame la serenidad necesaria para aceptar lo que no puedo cambiar, el valor para cambiar lo que si puedo cambiar, y la sabiduria necesaria para apreciar la diferencia. 

Dame cada día el pan necesario, y no solo el alimento que el cuerpo necesita, sino fundamentalmente el alimento espiritual que precisa nuestro Espíritu y el Ser interior de Luz que todos estamos llamados a ser.

Concédeme la iluminación y la sabiduría para saber comprender y discernir el mensaje de los grandes maestros que nos han precedido, asi como los misterios que mi mente no alcanza.

En comparacion con tu Inmensidad, somos tan poca cosa que no se como podemos ofenderte. No obstante, ten misericordia de mí y perdona mis ofensas hacia Ti y hacia mis hermanos. Dame humildad para pedir perdon cuando lastime a mis hermanos, y concédeme la luz del espíritu para que sepa ver a los demás con caridad y amor como lo que son, mis hermanos. Enséñame a perdonar a quien me ofenda,   dame sabiduría y amor para perdonar y no me dejes caer en el rencor.

No me dejes caer en la tentación del desánimo, cuando me veas caído, ayúdame a levantarme y a seguir caminando con alegría e ilusión.

No me dejes caer tampoco en la tentación del necio orgullo del materialismo cientifico, ni en ninguna forma de materialismo;  no permitas que me seduzcan los mensajes del “tanto vales cuanto tienes”, ni las proclamas ensalzadoras de la fama, belleza,  dinero ó poder,  cosas efímeras y caducas.

Dame sabiduría, Padre, y concédeme la virtud de la coherencia para poner en práctica mis convicciones; dame valentía para predicar no con palabras, sino con mi ejemplo.

Líbrame de todos los males de este mundo y no dejes que me seduzcan con su mensaje. Líbrame de mi Ego, presumido y egoísta,  de sus apegos, de los miedos que me inspira y de todas sus asechanzas; líbrame de mi orgullo, de mi avaricia, de mi ira y de todos mis demás defectos. Dame pureza de intención.

Al amanecer de cada dia, inspirame gratitud, dado que la vida es un regalo y nos lo has dado todo sin pedir nada a cambio.

Haz que viva esta vida con alegría y con esperanza, Padre mio. Y cuando llegue mi hora de partir, dame una muerte tranquila, y permite que emprenda el viaje con plena conciencia, y con alegría y esperanza."

Saludos.

En Jódar, a 18.04.2025.

Escrito y Publicado por Pablo Jesús Gámez Rodríguez.

 

27/02/2025

La pregunta

 

Pienso que el devenir histórico del ser humano a través de los siglos, debería de haber sido un proceso tendente al crecimiento y evolución espiritual de la persona. Y todos conocemos aquella gran verdad de que  “no solo de pan vive el hombre” pero nos empeñamos en vivir a espaldas de esa verdad y compruebo con tristeza que estamos haciendo el proceso inverso, nos estamos embruteciendo con el tsumani de materialismo y consumismo que nos invade, y tambien con nuestro individualismo. 

Hoy te propongo hacerte reflexionar. Deja tu mente en blanco, y olvidate del móvil por un momento.  Relajate. Te voy a proponer una simple pregunta, con animo de hacerte pensar un poco. Vas a elegir entre dos cosas que vamos a considerar como incompatibles  entre si, es decir, que si te quedas con la una, has de renunciar a la otra. La pregunta es esta:  Si te dieran a elegir entre ser RICO y ser FELIZ  ¿ tu que elegirias?

Para responder a la pregunta:

1.- No valen evasivas del tipo “ambas cosas no son incompatibles, se puede ser rico y feliz”, no. Hemos quedado en que son magnitudes incompatibles, has de elegir entre una y otra, en eso esta el quid de la cuestión.

2.- Tampoco valen otros subterfugios del tipo: “ya soy feliz, ahora quiero ser rico”, que no, déjate de trampas; o memeces del tipo "el dinero da la felicidad, si tienes dinero puedes conseguir todo en este mundo", que no, tu eres mucho mas listo que eso, dejate de trampas, pues que yo sepa, el dinero ni puede comprar el amor y cariño de verdad, ni puede comprar o hacer que regrese  la juventud perdida, ni puede comprar la salud, ni puede comprar la sabiduria; un tonto con dinero no deja de ser un tonto, aunque lo llamen "Don Tomas", en vez de "Tomas".

3.- Tampoco valen otros recursos para evadir la pregunta, como considerar que dinero y felicidad no son, por si mismas,  incompatibles, pues la realidad es que son incompatibles en la mayoria de los casos, de hecho, cuando llegas a  ser rico, no se acaban tus preocupaciones,  sino que cambias unas preocupaciones por otras, y a no ser que seas alguien especial, el dinero suele esclavizar a la gente.

4.- Resumen: Se sincero al responder, elige una cosa ú otra. La pregunta tiene por objeto que seas sincero contigo mismo y pienses y medites si para ti es mas importante poseer bienes materiales, o ser feliz.

EPILOGO. Recuerda que en este mundo se puede ser un perfecto desgraciado teniéndolo todo, y se puede ser feliz sin tener absolutamente nada, abre tu mente y mira por ahí y veras que hay muchos ejemplos.  Piensa 5 minutos al dia en esto, no mas, te aseguro que es un ejercicio muy saludable.

Además,  recuerda que desnudos nacemos, y desnudos hemos de partir cuando llegue nuestra ultima hora.   Entonces, ¿Qué?

Pablo J. Gamez Rodriguez.

21/10/2024

Conversaciones matutinas


Muchas mañanas  tomo café con mi buen amigo Fernando en Casa Blas, y  antes de irme para mi Despacho a cumplir con mis obligaciones hablamos un buen ratito sobre muchos temas, pero fundamentalmente sobre  la vida y  sus cosas. En muchas ocasiones, tras saludarnos, comenzamos asi:

-¡Otro dia mas, amigo …!

            -Si, vamos con otro.

 Parece una nimiedad, pero no lo es;  es bueno recordar lo obvio de vez en cuando,  abrir los ojos por la mañana, sentirse sano, respirar aire limpio y comprobar que es gratis, esto es, que es un regalo, que nada hemos pagado por estar aquí es algo que, al menos para mi, es un gozo indescriptible: te hace comenzar el dia con entusiasmo y alegria.

En nuestra última conversación, lo noté un poco impaciente en la búsqueda de respuestas a las eternas preguntas sobre quienes somos realmente o por que venimos a este mundo:  “¿Quién soy yo?”   “¿Por qué o para qué venimos aquí?”   El ser humano lleva haciéndose estas preguntas miles de años, lo cual es algo completamente normal y propio de nuestra especie, los humanos somos curiosos por naturaleza, queremos respuestas y las buscamos. Desde que somos bebes recién nacidos abrimos los ojos de par en par, y no hacemos mas que mirar y remirar a todos lados, y a todo lo que nos rodea; luego, al crecer, la curiosidad va en aumento.  Bueno, ahora, con la revolución tecnológica, el ser humano localiza las respuestas mucho mas rápidamente que antes, pero no sucede lo mismo con las respuestas a esas grandes y eternas preguntas: parece que la solución tarda en llegar.  

Y desde luego que es  bueno hacerse esas preguntas, y mas que bueno, estupendo y deseable, pues es señal de crecimiento espiritual  y de que uno está evolucionando.  Como  hemos estado mucho tiempo siendo y actuando de una determinada manera,   con la madurez  y la experiencia que traen los años  es normal que cambiemos de rumbo  y que ya no nos agraden las cosas que nos gustaban cuando éramos mas jóvenes. Además  “el jamón ya está mas que mediado”, y como ya queda menos para la hora de partir, llega un momento en la vida en la que el ser humano se  relaja y se hace estas preguntas. Quiere saber.

Sin embargo, creo que hay que tener paciencia. Recuerdo que le dije a mi buen amigo, que no es posible beberse el océano de un trago, primero porque es demasiado grande, y en segundo lugar, porque si hay que beberselo, mejor hacerlo sorbo a sorbo, poco a poco.  No se hizo Roma en un dia, y la búsqueda a esas eternas interrogantes, a veces, dura toda la vida, pero más que estar triste por no hallar respuestas, pienso que hay que estar contento porque haya nacido dentro de nosotros esa curiosidad y ese deseo sincero de buscar la verdad, pero no la verdad que nos enseñaron (con su buena fe, por supuesto) quienes ya se fueron,  o que tradicionalmente se ha considerado la verdad. Hablo de LA VERDAD, con mayúsculas.  Somos como recien nacidos al mundo del espiritu, bendita curiosidad esta que ha nacido dentro de nosotros.  Y defiendo que la paciencia tiene su premio, como la semilla, que cae en la tierra y germina, tardará mas o menos tiempo, pero al final nace una nueva planta, eso es seguro. 

En nuestro caso  tenemos todos los ingredientes necesarios:  primeramente tenemos la semilla, es decir, nuestra duda; también contamos con el agua, es decir, nuestro deseo sincero por encontrar la verdad; y por último contamos con algo muy importante, que es el  abono,  es decir, somos espíritus afortunadamente libres y no seguidores (ni esclavos -intelectualmente hablando-) de ninguna corriente política o religiosa.  Lectores e investigadores: de muchas, y todas son bienvenidas, pues todas (budismo, estoicismo, cristianismo, y un infinito etcétera) aportan su granito de arena, y lo que es sorprendente, se parecen en el fondo muchísimo mas de lo que pudiera parecer a primera vista; pero no somos seguidores acérrimos de ninguna, pues la verdad tiene muchas caras.   “Prefiero morir de pie antes que vivir de rodillas”.  Sabes perfectamente quien lo dijo, y eso se llama LIBERTAD,  tener libertad de criterio y de pensamiento, amigo mío, eso si que es un tesoro inapreciable.

Pero hay que tener paciencia, al final, como la semilla termina germinando, la respuesta terminará llegando, estoy convencido, pero como muchas generaciones  han marchado de aquí sin terminar de encontrar la respuesta, por si tu y yo no la encontrasemos, te recuerdo la frase que dijo quien tu también sabes:  “Bienaventurado el que busca, aunque muera creyendo que jamás encontró”. 

Merece la pena tener seguir adelante y gozar del camino. Y  mas que agobiarse por no encontrar aún la respuesta, es decir, mas que preocuparse por la meta final, creo que lo mas inteligente es  -lo reitero- disfrutar del camino,  vamos buscando la verdad con corazón sano y espíritu libre que no es deudor de postulado ajeno: ¿No te da felicidad eso?

Como “el espíritu es fuerte pero la carne es flaca”, es normal impacientarse algunas veces,  a mi tambien me sucede de vez en cuando;  sin embargo corremos el riesgo de parecer lo que no somos: desagradecidos, es decir, como he dicho antes, parece que se nos olvida disfrutar del camino de la búsqueda.   Me explico. La vida es un regalo, se nos ha dado todo sin pedir nada a cambio. Y eso es el regalo de los regalos, el regalo por excelencia, deberíamos de recordarlo todos.   Por eso, pensando un poco este fin de semana en nuestra última  conversación, me doy cuenta de que  quizás (solo es un quizás) cuando nos preguntamos “¿Por qué o para que estoy aquí?”, es como si le preguntáramos al Creador  “¿Por que me has dado este regalo?”  “¿Por que me  has regalado esto?”  

Te pongo un ejemplo que se me ha ocurrido. Cuando éramos pequeños y nuestros padres nos hacían un regalo, lo hacían  con su mejor intención porque nos querían y deseaban vernos felices; y nosotros no preguntábamos porque nos lo habían regalado  (”¿Porque me has hecho este regalo?”) ni nos torturábamos buscando la causa de ello; simplemente abríamos los ojos de par en par, sonreíamos, y disfrutábamos ese regalo.  Cuando nos cansabamos del regalo, lo dejabamos y  nos dedicabamos a otra cosa. Pero  te pregunto: si el niño, despues de estar varios dias  con el regalo,  llega un dia y nos mira con cara compungida y nos pregunta: "¿Por que me has hecho este regalo?"  Es que algo ha pasado en la mente del niño, algo le hace sufrir; y la culpa no la tiene el regalo que se le dio para que lo disfrutara;  hay que ver que es lo que ha pasado en la mente del niño.

Los niños y esto lo defenderé siempre, son mas inteligentes que los adultos, el niño disfruta; pero el adulto, mas que  disfrutar de las cosas, parece preocuparse mas  por el porqué de esas cosas,  y/o por el propósito de la vida.

  Yo creo que a lo mejor no hay propósito:  la vida es un regalo en si, y como tal regalo, hemos venido aquí… a disfrutar de ese regalo que el Creador nos ha dado con su mejor intención.

           Y sobre todo, no olvidar algo fundamental, que nada traemos aquí, y que nada nos podremos llevar, pues venimos a este mundo "a querer a los demás y a que no quieran un poco, si hemos venido a otra cosa estamos equivocados". Y esta es una de mis frases de cabecera.  Por eso, yo creo  que la palabra mágica se llama “compartir”, y también hemos de no olvidar que todos los seres humanos somos hermanos, sin distinción de nacionalidad, raza, sexo, orientación política o religiosa…

            Y por último:  meditar un poco, apartar el móvil y darnos cuenta de estas cosas, lo cual ya es un gran logro. Y por último, practicar la coherencia.

Quizás sea la mente la que nos juega malas pasadas, y yo creo que hay que apaciguarla haciendo meditación, y vivir el presente con atención plena.  La mente siempre con su ruido mental, junto con nuestra  impaciencia, es un cocktel explosivo: nos sumerge en la ansiedad, y hace que la verdad se aleje de nosotros, y a lo mejor tenemos esa verdad mucho mas cerca de lo que pensamos.  Pero nuestro ego nos aparta de la verdad; y yo creo en el ser humano, en el fondo todo el mundo es estupendo, solo que no se nos damos cuenta de ello, porque estamos mas pendientes de nuestro ego que de quien somos en realidad.

A veces comparo la vida con un rio,  nosotros vamos por ese rio cada uno en nuestra canoa, tratamos de remar en una ú otra dirección, pero al final la fuerza de la corriente nos lleva por donde tiene que llevarnos.   En mi caso, he comprendido que cuando he tenido sufrimiento en mi vida ha sido por no aceptar la realidad de las cosas y querer remar en otra dirección distinta; cuando me he dejado llevar por la vida, he encontrado el sosiego y  la paz.  Y dejarme llevar por el rio es soltar los remos, o lo que es lo mismo, apaciguar la mente, y dejarse llevar por cada instante agradable que la vida te regala; pues haberlos los hay, y muchos: solo tenemos que apagar la mente un poco, y aprender a VER.

Y las respuestas… ya llegarán… y si no, ¡al menos somos libres!  Como decía mi adorado Séneca, estamos más cerca de la meta:  alcanzar la libertad perpetua,  sin ser esclavos de ningun hombre ni de  ningun dios”, objetivo que, decía él, se tenia que buscar por encima de todo.

Camarón lo dijo a su manera: “Volando voy, volando vengo, por el camino yo me entretengo”.  Date cuenta: no dice la letra de la canción que estaba deseando llegar a la meta, sino que se entretenía por el camino. Y yo creo que hacia muy bien.

Saludos.

Pablo Jesus Gamez Rodriguez.