"Cree a aquellos que buscan la verdad, duda de los que la han encontrado" (André Gide)
"No estoy de acuerdo con lo que dices, pero defendería con mi vida tu derecho a expresarlo" (Voltaire)

"La religión es algo verdadero para los pobres, falso para los sabios y útil para los dirigentes" (Lucio Anneo Séneca)
"Cualquier hombre puede caer en un error, pero solo los necios perseveran en él" (Marco Tulio Cicerón)
"Quien no haya sufrido como yo, que no me de consejos" (Sófocles)
"No juzguéis y no sereis juzgados" (Jesús de Nazaret)
. . .

04/05/2009

El hombre de la máscara

Todas las mañanas seguia la misma rutina. Se levantaba e iba al cuarto de baño. Se daba una ducha rápida y luego se afeitaba. Cuando se miraba al espejo se veia tal cual era, sin máscara ni disfraz. Era él. Y él queria ser siempre así.

Pero desde pequeño le habian sugerido una y otra vez el eterno y conocido cántico de que habia que protegerse del mundo. ¡Hay gente muy mala por ahí, niño, no le puedes decir la verdad a todo el mundo, tienes que tener más idea…! Y asi, movido por éstos y otros consejos similares, aprendió a ponerse la máscara. Al principio le incomodaba enormemente, pues era rugosa y artificial y le impedía expresarse con libertad: la máscara no le dejaba ser él mismo. Pero con el tiempo se acostumbró a ella, y tambien se consoló: no era el único que la llevaba, antes al contrario: todo el mundo iba por la calle con su máscara puesta.

De modo que salia con ella a la calle y lo acompañaba allí donde fuera: al trabajo, a la casa, al restaurante, al cine; a la universidad, en fin, a todos los sitios. Por la noche, cansado y agobiado, se quitaba la máscara para volvérsela a poner al dia siguiente. Si, aparentemente aquello funcionaba bien. Evitó muchos sobresaltos y disgustos, esquivaba bien los ataques y esa aparente imperturbabilidad daba sus buenos resultados.

Pero llegó un momento en el que ya no sabia si el era el o era el hombre de la máscara. De tanto llevarla puesta empezó a pensar que no era el quien poseia la máscara, sino la máscara la que lo poseía a él. Y un buen dia se dio cuenta de que ya no era él; y el deseaba ser él mismo, con sus virtudes y sus defectos, con sus grandezas y miserias. Ir por el mundo con máscara le habia dado buenos resultados, pero habia tenido que pagar un alto tributo por ello.

Aquella lejana tarde, lo vió claro. Comprendió que no merecia la pena seguir con la máscara puesta. Perdió todos sus miedos. Habia estado en un error: su máscara habia sido hija de su miedo y nieta de su cobardía. Decidió ser valiente y a media jornada se la quitó, tirándola al mar. Decidió ir por el mundo sin máscara. Y pronto comprendió que respiraba, vivia y sobre todo sentia y se sentía mucho mejor. Era auténtico. Era él. Y una sensación de placentera paz se apoderó de su espíritu.

Pensó que si todo el mundo tuviera la valentía de quitarse la máscara que llevaban puesta, quizás el mundo fuera de otro modo.

Fue una de las decisiones más acertadas de toda su vida.

Saludos.

44 comentarios:

genialsiempre dijo...

!Que importante quitarse la máscar!, lo que ocurre es que generalmente aprendemos tarde la lección y algunos no se la quitan en su vida. Claro que hay otros que ni quitándosela valen la pena. Se puede escribir un tratado sobre esta cuestión

Francisco O. Campillo dijo...

Quitémonos nuestra máscara, y luego...
que venga lo que venga.

un abrazo solidario.

LUISA M. dijo...

Un buen relato que, como otros tuyos, nos hace reflexionar.
¡Hay tanta gente que va por ahí con una máscara puesta y ocultando su verdadero rostro, su auténtica personalidad!
¡Fuera máscaras! Seamos nosotros mismos y actuemos en consecuencia.
Besos.

Andaya dijo...

He sentido un fuerte deja vù al leerte. Perfectamente podría haber escrito yo esta historia hace mil años.
Las imposturas nos dominan si llegamos a creer que nos hacen fuertes. Qué error más grande.

Juan Duque Oliva dijo...

Mirar cara a cara a la vida puede que sea la mejor opción como tu muy bien has dicho en esta magnífica narración.

Un abrazo compañero

Silvi (reikijai) dijo...

Salama asegura que“lo más importante es mantener una actitud abierta”.No en vano,“desprenderse de la máscara de la personalidad requiere un compromiso a largo plazo”,reconoce. De lo que se trata es de “aprender a conocernos,comprendernos y aceptarnos tal como somos,pues sólo así podremos iniciar el cambio hacia la persona que podemos llegar a ser”.Que tengas una hermosa tarde. Besitos.Silvi.

Gizela dijo...

Hay muchos tipos de mascaras.
Pero sé que te refieres a la que muchos usan como protección.Y en casi todas las ocasiones, no la confecciona el ser humano, sino los golpes de la vida, las tormentas que se desatan y con sus rayos dejan cicatrices de graves quemaduras en el alma.
Pero el final de tu linda historia, es el más sabio.
Ir desnudo por la vida, te hace mas vulnerable.
Pero es una vulnerabilidad en ambos sentidos.
Duelen más las quemaduras, pero curan también mucho más las caricias, cuando la vida te sonríe y el sol sale después de la tormenta.
Pero es más fácil, decirlo que hacerlo.
Ir de frente con la vida, sin guarecernos en máscaras, es un ejercicio que requiere de diaria comprensión, de profundo apego y agradecimiento a la vida, en todas sus intensidades y matices.
Un abrazote inmenso, sin mascara.

Unknown dijo...

En ocasiones la mascara oculta aquello que socialmente no es correcto. Una huida hacia adelante. En otras, seria fantastico andar sin ellas y dejar que la realidad que nos rodea dicte su propia sentencia.
Un abrazo (Sin mascara)

Carmen Conde Sedemiuqse dijo...

Seguro que si que fue la mejor decisión. respiró libertad "su libertad"
me gusto.
Besos y amor
je

loose dijo...

Máscara es sinónimo de inseguridad, de temor, desconfianza......EN UNO MISMO PROYECTADO EN LOS DEMÁS.

Profundo relato.
Besos.

Pd: si tienes la oportunidad de leer el libro "El caballero de la armadura oxidada" hazlo. Es pequeñito pero matón.;)

Gabiprog dijo...

Interpretar un personaje de continuo lleva malos efectos secundarios.

Curioso... Tengo en 'borrador' otra perspectiva del tema.
je!

Saludos.

Anónimo dijo...

ojalá fuera así de fácil

un abrazo

Amig@mi@ dijo...

Sabes Corne?
TENGO DOS POSTS PREPARADOS SOBRE MÁSCARAS.
Uno es parecido al tuyo, de veras, me hizo gracia,
Yo también la uso a menudo, pero de distinta manera.
Un besote

Manuel de la Rosa -tuccitano- dijo...

bueno..eso que cuentas es la realidad con final feliz... pero tan acostumbrados estamos de ponernos lamáscara, que ya no sabemos pasar sin antifaz... es parte nuestra. Y somos incapaces de discernir la realidad del hogar con la aspereza de la vida laboral. Saludos

Anónimo dijo...

Que gran reflexión. Y que gran verdad. Lo malo es las marcas que dejan en la piel el llevar una máscara tan ajustada durante tanto tiempo.

Salu2

josé maría dijo...

Hola Pablo, despues de cuarenta y cinco años me quité la máscara...
La VIDA sale "más cara"... no vale la pena...

PAZ Y AMOR para todos, sobre todo para ELLOS...

Marinel dijo...

Las máscaras; solo deben utilizarse en momentos determinados y con ciertos seres que no merecen sabernos,conocernos e incluso no son merecedores de nuestro aprecio.
Pero es tan ligero llevar tu rostro al aire, sin tapujos ni disfraces!
Es un tema peliagudo y muy a la orden del día...sin duda.
Besos.

La Gata Coqueta dijo...

Con mascaras esta el mundo lleno y es simplemente por no saber tener la cabeza bien puesta sobre los hombros.

Para ir por la vida no hay nada que te oprima o atropelle que tu no puedas esquivar en cualquier momento y seguir dejando a tu paso todo aquello que te intente molestar.

Es a veces cuestión de principios en la enseñanza.

Ten en cuenta, unos llevan la mascara y otros están y tienen a los demás enmascarados a sus ordenes...

Un cordial saludo.
PD. Te fuiste hasta Jerez?

Neogeminis Mónica Frau dijo...

Es así, Cornelius, la sociedad nos enseña y nos impone llevar máscaras, en nombre de la convivencia, de las buenas costumbres, de las formas, esas máscaras nos impiden mostrarnos en nuestra verdadera naturaleza y eso termina dañando nuestra espontaneidad y nuestra libertad. No podemos andar sin límites en la vida,es verdad, no sería bueno que cada cual hiciera lo que se el viniera ne gana, pero esos filtros necesarios se transforman muy fácilmente en armaduras que, lejos de protegernos, terminan aislándonos.

Me gustó el trasfondo de tu cuento, deja una buena enseñanza.


un abrazo!

Hada Saltarina dijo...

Hola Cornelivs,

Qué tal el finde? Espero que muy bien!

Verás, te envío mi comentario y otro más. En el mío te cuento que así es, que aquello que usamos para protegernos puede convertirse en nuestra cárcel y hay que saber ponerle freno.

En cuanto al segundo comentario es de mi amiga DESDEMISMONTAÑAS (puedes verlo en mi blog). Me dice que te quería escribir un comentario pero que no puede acceder porque tienes limitado el número de comentaristas o algo así (probablemente no haya entendido muy bien este punto). Ahí va lo que quiere decirte DESDEMISMONTAÑAS:

"Hola CORNELIVS,
He entrado a visitarte en más de una ocasión. Me cuelo desde la casa virtual de mi admirada Hada Saltarina.
Hoy no he podido resistir la tentación, el deseo, de unirme a todos los que perfectamente podíamos haber escrito tu historia. LA MASCARA!!
¡¡Que alivio, que grandeza ir por la vida mostrando con humildad lo que SOMOS!!"


Un abrazo fuerte de las dos

Unknown dijo...

¿que hacias espiando en mi espejo?

jajajajaja. creo conocer al tipo ese. Y creo conocerle muy bien además. Cuando se quitó la mascara, se quitó también el guardapolvos blanco, que la verdad no le quedaba, se quitó el reloj, se dejó crecer el cabello, se dejó de rasurar todos los días y le crecieron las barbas, se quitó también el coro de seguidores, que estaban sobre el como las hormigas van sobre la cucaracha muerta. Y con el tiempo dejaron de llamarle Doctor, porque le dieron un titulo más importante. Hoy en día, le llaman Señor.

Te dejo un abrazo desde el otro lado del mar.
juank

Manuela Fernández dijo...

Quizás lo que llamamos "máscara" es realmente como somos, y lo que creemos ser es simplemente una ilusión de como desearíamos que fuésemos.

Martine dijo...

No siempre los consejos que te dan de pequeño son acertados...cortan las alas... de la LIBERTAD,pero nunca es tarde...

Un baiser à visage découvert, Cornelivs, mon Ami.

Kyara Athena dijo...

Nas!!

A veces me encuentro con blogs como éste que me quitan el aliento, es impresionante tanto talento en tantas partes del mundo esperando ser leido y compartido que a veces me hace sentir tan pequeña... pero me alegra haber llegado aquí.

Tus escritos son realmente valiosos y de calidad indudable.

Éste en especial, creo que a todo el que lo lea le provoca el mismo sentimiento, o al menos uno muy semejante.

Es una verdad universal, el uso inevitable de máscaras, y en ocasiones más de una.

Todos vivimos situaciones y circunstacias distintas, y por lo tanto nuestras máscaras son de naturaleza diferente. Quitárselas requiere de valor, decisión, compromiso...

Yo he vivido tan poco, pero me gusta aprender en cabeza ajena y me he podido dar cuenta de mis máscaras, o al menos las más pesadas. Tengo conciencia de ellas, más debo admitir que no he podido deshacerme de todas y quizá nunca lo logre, pero prefiero vivir intentándolo que darme por vencido tan pronto.

Gracias por expresar de forma tan maravillosa todas ésas palabras que quedaran grabadas en mi memoria.

Nos estamos leyendo, hasta entonces...

Anónimo dijo...

Buen escrito y para reflexionar. Un gusto leerte. Saludos.

Silvia dijo...

hola!brillante relato!esta bueno ir por la vida sin mascaras...los guerreros se fortalecen,son más valientes,y aprenden de las experiencias...y van por la vida dando la cara..
besotes.
silvia cloud

josef dijo...

Me ha gustado la idea de la máscara. excelente Cornelivs! Por cierto me pediste una vez si te podía dar algún consejo sobre tu obra de El Viejo Centurión. Debo decirte que he eleído algún capítulo y me han gustado bastante. Si debo darte consejos te los daré pero de moemnto te diré una cosa fundamental para escribir mejor. Limar y limar, cuanta más paja quites mejor. UN abrazo!

Myriam dijo...

Hola!!! Bravo por él que pudo hacerlo de esta manera: Se decidió y lo hizo, sin más.

Para la gran mayoría de las personas, quitarse la máscara, llegar al centro del ser, requiere de un arduo y profundo trabajo consigo mismo, muchas veces dificil de lograr
sin ayuda experta.

Un Abrazo

Luis dijo...

Usas la primera persona en tu relato, me parece muy bien. Y me permito dejar en el aire una pregunta: ¿Y si quitásemos la máscara a nuestros políticos, dirigentes,... etc. etc...?.
¿No se les vería mejor el plumero?.
¿No funcionaría mejor la sociedad, si nos mostrásemos todos como realmente somos?
Posiblemente sea un utópia...
Un cordial saludo,
Luis

Luis dijo...

Usas la primera persona en tu relato, me parece muy bien. Y me permito dejar en el aire una pregunta: ¿Y si quitásemos la máscara a nuestros políticos, dirigentes,... etc. etc...?.
¿No se les vería mejor el plumero?.
¿No funcionaría mejor la sociedad, si nos mostrásemos todos como realmente somos?
Posiblemente sea un utópia...
Un cordial saludo,
Luis

Pedro Ojeda Escudero dijo...

¡Fuera máscaras! A la calle, a rostro abierto.

PABLO JESUS GAMEZ RODRIGUEZ dijo...

GENIALSIEMPRE: Ok, Jose Maria; pero tambien pienso que no hay gente tan mala que no tenga algo bueno! Un abrazo.

FRANCISCO O. CAMPILLO: Asi es, amigo. Un abrazo.

LUISA M. Asi es, ojala fuera asi; el mundo seria distinto. Un abrazo.

ANDAYA: Asi es, amiga, ese es un gran error que convendría enmendar. Un abrazo.

LUZ DE GAS: Gracias amigo Juan, otro abrazo para ti.

REIKIJAI: Sabias palabras las tuyas, amiga. Besos.

GIZELA: Asi es, amiga Gizela, interpretaste bien. Otro enorme abrazo para ti.

JAN PUERTA: Gracias amigo, otro abrazo para tí.

SEDEMIUQSE: Gracias, un abrazo.

LOOSE: Asi es amiga. Y, por cierto, leeré el libro. Un abrazo!

GABIPROG: Si, y esos efectos secundarios son muy desaconsejables! Un abrazo.

AMOR Y LIBERTAD: Todo es cuestión de proponerselo, amigo. Un abrazo.

AMIGA MIA: Gracias Montse, otro abrazo para ti.

MANUEL DE LA ROSA: Si; asi sucede muchas veces. Un abrazo.

MARKOS: Tambien llevas razón; pero la cicatriz se cura. Un abrazo.

JOSE MARIA: Gracias amigo, paz y amor para ti tambien. un abrazo.

MARINEL: Asi es, amiga. Me ha gustado tu visión. Un abrazo.


LA GATA COQUETA: Gracias, mi querida gatita, me ha encantado tu comentario. No, no fui a Jerez, me fue imposible. Un abrazo.


NEOGEMINIS: Me ha encantado tu sabio y certero comentario amiga. Gracias y un abrazo.

HADA SALTARINA: Muchas gracias, mi estimada amiga. Ya te he dejado mi comentario en tu blog, para ti y para tu amiga. Un enorme abrazo...!

JUAN CARLOS LOZANO: Interesantisima tu visión y tu aportación, revela la luz que te guia. Y me gusta. Un enorme abrazo...!

MANLY: Te doy mi cordial bienvenida. Gracias por tu visita, eres muy amable! Vuelve siempre que lo desees. Un abrazo.

SELMA: Asi es, amiga. Otro enorme abrazo para ti.

KYARA ATHENA: Mi más cordial bienvenida amiga. Muchisimas gracias por tu visita y por tu muy amable comentario. Vuelve siempre que quieras. Un abrazo...! (estoy en deuda contigo, visitaré tu blog a la mayor brevedad)

SALVADOR PLIEGO: Igualmente te digo, amigo, gracias por tu visita, estas en tu casa. Un abrazo.

SILVIA: Asi es, amiga. Besotes y abrazos para ti...!

MODERATO: Gracias amigo, un abrazo.


MYR: Un enorme abrazo querida amiga.

QUIDQUID: El caso es que me gusta muchisimo esa utopia. Me apunto a la idea. Un abrazo...!

PEDRO OJEDA: ¡Fuera máscaras! Un abrazo.

Unknown dijo...

Mi sabio amigo Cornelivs, coincido con muchos de tus lectores y el concepto siempre será: los límites que nos imponemos desde nuestro interior termina marginando nuestra esencia.
Y de a poco dudaríamos de quienes somos en verdad.
Perder el yo, extraviar el rumbo es m ucho más peligroso.
Gracias por invitarnos a seguir reflexionando, un beso sin máscaras y te espero en mi espacio con novedades que me interesa mucho que leas

Grumpy dijo...

Seguro que era una máscara?
No sería una corbata!!!!



Me encantó!


un saludo

mati dijo...

si... deberiamos dejar las mascaras a un lado¡¡
por aqui, por estos mares me alegra ver que hay pocas mascaras¡¡¡
un besazo, buena entrada

Rita dijo...

La máscara es con frecuencia un chaleco antibalas, no te pueden hacer daño si la llevas puesta, y cuanto cuesta a veces quitarsela.....me ha gustado tu entrada, un beso

Susana Peiró dijo...

Me uno al coro de voces que votan por quitar la máscara!

No es sencillo, el mundo castiga semejante "osadía" (me recordó una tira humorística de Quino ¿Lo conocés?)Pero vamos que vale la pena!

Un fuerte Abrazote Amigazo!

Rosa Sánchez dijo...

Para desprendernos de esa máscara que, a veces, por desmotivación, desinterés o por rutina vamos forjando sobre nosotros mismos, el primer paso es, sencillamente, darnos cuenta.
A veces es necesario que alguien ponderado, reflexivo y con inquietudes nos dé un pequeño toque y nos despierte del letargo en el que estamos sumidos...
Cornelivs, eres un genio.

Alijodos dijo...

Ser autentico es lo que cuenta pero para quitarse la mascara hay que tener seguridad y una gran autoestima...y aun asi hay momentos en los que no se puede...estoy contigo amigo cornelius pero no es facil aunque ¿quien dijo que iba a serlo? un abrazo un gran post..

David Alonso dijo...

La libertad, la sinceridad y la bondad.... no requieren máscaras ni las necesitan. Esa es una acertada desición que ha tomado esa persona... a veces se aprenden las lecciones muy temprano, desde muy pequeños. Pero si es que estamos aquí cuatro días y allí otros cuatro...

Un abrazo amigo.

David

Pedro Estudillo dijo...

Un relato genial; creo que todos podríamos aplicárnoslo.
Yo pienso que disponemos de más de una máscara, y vamos cambiándola cada vez que nos enfrentamos a gente o a situaciones distintas.
Como tú dices, habría que tirarlas todas al mar. Todos saldríamos ganando.

Un abrazo.

PABLO JESUS GAMEZ RODRIGUEZ dijo...

PAOLA: Gracias querida amiga, pero no me tengo por sabio de nada, sino por aprendiz de todo. Voy en seguida a tu blog. Un abrazo.

GRUMPY: Gracias y mi mas cordial bienvenida a esta tu casa. Un abrazo.

1MATI: Gracias amiga, otro besazo para ti.

RITA: Asi es; pero ese chaleco antibalas es muy deformante a veces! Un enorme abrazo.

SUSANA: Gracias, mi querida amiga, ya lo creo que vale la pena! Un enorme abrazo.

ROSA SANCHEZ: Muchisimas gracias por tu comentario y por tu piropo, mi estimada amiga, pero no me tengo por genio (que va...!), sino por aprendiz de la vida, como todos. Un enorme abrazo...!

ALIJODOS: Asi es, amigo; no es fácil, pero merece la pena intentarlo! Un abrazo.


DESCUBRE IRLANDA: Saludos...!

SHINGEN: Totalmente de acuerdo amigo. Un abrazo...!

PEDRO: Gracias como siempre, amigo Pedro. Un fuerte abrazo.

La Dama Zahorí dijo...

La sencillez y falta de artificio con la que lo cuentas todo me hace pensar que tu máscara permanece olvidada en cualquier cajón. Espero que el sencillo encanto de tu prosa me ayude a abandonar también la mía.

Saludos

Unknown dijo...

Últimamente voy escaso de palabras.
Sin embargo al leer tu escrito, me he quedado sin el resto de ellas.
Fantástico.
Un abrazo.