"Cree a aquellos que buscan la verdad, duda de los que la han encontrado" (André Gide)
"No estoy de acuerdo con lo que dices, pero defendería con mi vida tu derecho a expresarlo" (Voltaire)

"La religión es algo verdadero para los pobres, falso para los sabios y útil para los dirigentes" (Lucio Anneo Séneca)
"Cualquier hombre puede caer en un error, pero solo los necios perseveran en él" (Marco Tulio Cicerón)
"Quien no haya sufrido como yo, que no me de consejos" (Sófocles)
"No juzguéis y no sereis juzgados" (Jesús de Nazaret)
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19/09/2008

De Senectude

"De la vejez", en castellano. Es una de las obras más bellas salidas de la pluma de Cicerón. El gran filósofo reflexiona sobre la vida y enseña al hombre postmoderno (empeñado en alcanzar la eterna Juventud), que envejecer puede ser la coronación de una serie de etapas vitales, un desafío y casi una aventura. Cicerón, ya maduro, piensa su pasado y vislumbra el futuro con dignidad y con esperanza.

La lectura de esta obra maestra es impostergable, y yo añadiria que obligatoria para todos los ancianos que solo saben quejarse y amargar la vida de cuantos hay a su alrededor.

Ojalá cuando yo sea viejo goce de una vejez como la de Cicerón: con paz, serenidad, tranquilidad y presencia de ánimo; y rodeado de amigos que disfrutaban de su compañía. Cicerón dice que la vejez no es mala en si misma, sino que es el ultimo acto de la vida y forma parte de la naturaleza. Hay que aceptarla con naturalidad; pues hubiera sido indeseable que quien hizo el inicio de la vida, tan bello y tan luminoso, hubiera descuidado el ultimo acto (la vejez), como si hubiera sido un “poeta sin arte que descuida el final de la obra”. Bello es el principio y bello es el fin, pero somos los hombres los que hacemos feo ese fin.

Es decir, los necios atribuyen a la vejez sus propios vicios y su propia culpa, y la culpa NO es de la vejez, sino de ellos. Ni las canas ni las arrugas pueden obtener, así de repente, autoridad; mientras que la vida que se ha llevado con honestidad es la que recoge en los ultimos años los frutos de la autoridad. Es decir, se recoge lo que se siembra. Dice Cicerón que a los ancianos se les acusa de que son pesados, inquietos, iracundos y difíciles, y tambien avaros. Pero contesta inmediatamente que “esos vicios son propios de varias circunstancias que durante la vida han influido en las costumbres modelando tu carácter, pero no son vicios propios de la ancianidad.”

Es cierto que la ancianidad aparta del manejo de los negocios. Pero a ello contesta Cicerón que las cosas de envergadura, las realmente importantes y que exigen un mayor sentido de responsabilidad, no se realizan con fuerza o velocidad, sino con reflexión autoridad y juicio, y de estas cualidades no solo no carece la vejez, sino que con ella se agigantan.

Tambien es cierto que el cuerpo se hace más enfermizo. Cicerón dice que es normal, que hay que aceptar la naturaleza, y que no hay problema, porque a los viejos no se les exige que sean fuertes.

La vejez tambien priva de casi todos los placeres. Cicerón arguye que cuando ejerce su dominio la concupiscencia, no hay lugar para la templanza y de ningun modo puede permanecer la virtud en el reino del deleite, pues durante la excitación nada se puede pensar ni captar, ni con la razón ni con el pensamiento. El deleite es para la juventud, no para el viejo, pues al ser más intenso y prolongado el deleite extingue toda la lucidez del alma y cierra los ojos de la mente.

Cicerón dice que es de mucho valor tener ya el alma despojada del desorbitante deseo de ambicionar, de esa lucha contra las enemistades, de todas las concupiscencias, y es adorable que el alma pueda vivir tranquila consigo misma. La vejez tiene otro tipo de deleites: compañía de amigos, pasear, cultivar el campo, aconsejar a los demas, darles tu experiencia, sentirte reconocido.

El fruto de la vejez consiste en el recuerdo y la abundancia de los bienes realizados. Es mas conforme con la naturaleza que los ancianos mueran, porque estan más cerca de la muerte. Si un joven muere es mas contrario a la naturaleza.

La vejez está cerca de la muerte, y tambien es natural. El joven cuando muere es como una llama que desaparece bajo abundante agua; por el contrario, el morir de los ancianos se asemeja a un fuego que sin violencia, lentamente, consumido, se extingue, sin que ellos hayan puesto nada por su parte. Las manzanas verdes se arrancan con violencia, y las maduras caen por si mismas.

En definitiva: el destino del viejo es dar buenos consejos, amor y experiencia a los demás. Si han llevado una vida honesta, tendrán una vejez honesta. Si han tenido una vida llena de vicios, su vejez será viciosa, y la culpa no será de su vejez, sino de ellos.

Saludos.
.

32 comentarios:

Silvia_D dijo...

Que razón tienes, niño, somos lo que comemos, lo que bebemos... nos hacemos a nosotros mismos y a nuestras arrugas, unos de risa, otros de penas , otros se marcan en vicios.

Besos, señor ocupado, espero que no te estreses.

Feliz fin de semana y besosss

Amig@mi@ dijo...

Me quedo con esta sabia frase:

El fruto de la vejez consiste en el recuerdo y la abundancia de los bienes realizados.

Ojalá leyeran tu artículo muchos ancianos cascarrabias, ¿qué bien les vendría!

Amig@mi@ dijo...

Se me olvidaron los...
Besos ;)
jeje, que ya si lo entiendes

Roy Jiménez Oreamuno dijo...

Que excelente reflexión sobre la vejez, y es tan cierto todo lo que ese gran hombre expuso.

Ojala todos los ancianos tuvieran ese honor de tener una vejes como la de cicerón, hoy en día en CR muchos son abandonados en hospitales, o abusados por sus familiares, a pesar de que dieron todo por eso que hoy los desprecian.

Me encanto la alegoría de la manzana, y es cierto a los 20 uno tiene el cuerpo que la naturaleza le da, y después de los 40 el cuerpo que se merece por cómo fue cuidado.
Saludos

Oteaba Auer dijo...

Y sin embargo, el viejo al que se le respetaba por estar en posesión de la sapiencia, hoy en día, se le aparta sin respeto porque cualquier chavalin que tiene acceso a más información de la que él haya podido recolectar en toda su vida (no digo de la experiencia eh)

A mis hijos les digo:
Cuando sea vieja y me olvide de ustedes, por favor, no se olviden de mi... :)

Besos

Creaciones 2020 dijo...

Yo creo que lo mas triste de la vejes es que al acercarse muerte es irremediable separacion con sus hijos ...es un cerrar los ojos para siempre y no poder volver ni a verlos ni a abrazarlos nunca mas . En cuanto a los vicios ,no todos los vicios pertenecen a las "
personas malas" muchas vecen son el baston de un soportar alguna vida con ciertas dificultades inmanejables para la conciencia que esa persona ha adquirido hasta el momento .Conozco viejos que no han tenido ningun vicio , que se sienten que han vivido correctamente sus vidas , juzgando a los que no son "tan correctos" como ellos , y son los mas amargados . Creo que una vejez feliz es la de aquel que ha vivido su vida ,sin ejercer influencia negativa en nadie , y el que no se ha dejado infulenciar por nadie jamas .Y que siguio siempre los dictados de su corazon ,asi en la despedida final no tendra ni resentimientos ni arrepentimientos .En cuanto a los recuerdos ...lavida hay que vivirla hasta el ultimo respiro , siempre es presente,los recuerdos solo traen nostalgias , tristezas. Pienso que el verdadero fruto de la vejez es haber llegado a ella y no haberse quedado en el camino ,como desgraciadamente tantos quedan,y tan solo con llegar a la vejes el ser humano deberia sentirse feliz y agradecido todos los dias , sea en su propia casa,oen un hogra de ancianos , cercadel mar , o en el campo ,en una ciudad .La vejes no es una enfermedad , como la juventud no es un certificado de salud. Conozco viejos que de jovenes estuvieron muy enfermos y que ahora son muchos mas sanos que cualquiera de su misma edad .Cornelvis, elegiste un lindo tema ,pido disculpas por haberm extendido tanto en mi comentario , te dejo un saludo desde Uruguay. Besos .

Pedro Ojeda Escudero dijo...

Qué gran texto este que comentas. Debería leerse más hoy. Es curioso, cuando más viejos hay en nuestra sociedad, menos se medita sobre ese momento.
Voy a releerlo este fin de semana. Gracias por el recuerdo.

ALAS DE MI LIBERTAD dijo...

perdoname amigo en estos momentos,tengo mucho lio y apenas puedo entrar,si quiero dejarte mis besos y abrazos de siempre,darte las gracias por tu visita a mi rinconcito,te prometo que cuando,toda esta marea de acontecimientos que estoy viviendo pase,te leere y me pondre al corriente de tus escrito,no me gusta dejarte comentario,sin antes leerte con tranquilidad y disfrutar de tu blog,cuidate y ten cuidado con el estres,buen fin de semana amigo

Rampy Towers dijo...

Hola Cornelivs, como trucha que vuelve a su lugar de origen a desovar", aquí vuelvo yo de nuevo a "desovar" un comentario sobre tu post, que, por cierto, me ha encantado, será porque tiene algo de mágico.
Un abrazo enorme y que pases un excelente fin de semana
Saludos
Rampy.

María dijo...

Este texto se merece ser leído, de nuevo, es muy bueno y te voy a dar un aplauso, espera ...

Plasf plasf plasf.

Tenemos mucho que aprender de las personas mayores, son los que han cumplido la carrera más larga de la vida, tienen mucha experiencia, y les debemos respeto y mucho cariño, y no por tener arrugas y tener el cuerpo agachado o que no puedan valerse por sí mismos, no van a ser útiles en la sociedad, ya que siguen teniendo corazón y sentimientos, y yo les hago una reverencia y un beso muy grande para todos ellos desde tu blog, allí llegaremos algún día, si es que llegamos.

Un beso, Cornelivs, y feliz fin de semana.

Unade40 dijo...

Cuando llegue la vejez espero ser tranquila, suave y sabia como mi madre... pero también confio en seguir queriendo experimentar, con la cabeza y con el cuerpo. Saludos primeros.

Ericarol dijo...

Vive hoy, como si fueras a morir mañana. Besos cansados. Ericarol.

Haideé Iglesias dijo...

En el momento acual de esta sociedad occidental, lo viejo se tira. La rapidez con la que se estropean la mayoria de los productos que compramos habla de que cada vez es menos importante la calidad. El concepto de usar y tirar esta a la orden del día.
Por otro lado el mercantilismo de la sociedad capitalista, y no es cuestion de política, impulsa al consumo, con lo que se centra la atención en cuan efimero es algo para poder poner en el mercado algo nuevo con rapidez para hacer dinero. Este ritmo hacia adelante nos deja sin tiempo para mirar adentro, por ello la obsesión, ya muy generalizada, del culto a lo externo. Pastillas que parecen solucionarlo todo, cirujias que también parecen solucinarlo todo. Los medios de comunicación bombardeando constantemente con la vanalidad. Los ancianos cada vez menos ancianos, porque se les ha dicho que pueden ser más jovenes, evidentemente por que son un mercado floreciente muy aporvechable.
Y nosotros en medio de todo esto. Parados, tranquilos, sosegados, reflexivos,... Es así como se puede llegar a entender que la ancianidad es un estado mental en el que se recogen los frutos de las experiencias, se atemperan los ánimos y por ello se puede acceder a una mayor comprensión; pudiendo de este modo transmitir algo positivo a las generaciones que estan empezando, un ciclo natural; si un ciclo natural que se nos está haciendo imposible de ver por la artificialidad en la que vivimos. Somos naturaleza no aparatos; aunque por lo que puedo apreciar, para muchos, somos aparatos y no naturaleza.
Y si, de lo que nos alimentemos espiritualmente, es de lo que viviremos, no sólo de la comida. Pero esto no sólo en la vejez, sino en todas las épocas de nuestra vida.
Lo que sembremos hoy será nuestro pan para mañana. Ya veremos lo que los hijos de los hijos de estos ancianos aportan a esta sociedad, como no cambie nuestro modo de percepción y de toma de conciencia de que somos los únicos responsables de nosotros mismos.
En cuanto a lo del sexo, en esto me parece que se equivocava Cicerón, la mente es nuestra mejor aliada, pero no entendido esto como lo que acabo de exponer, sino como el hecho de que nuestro cuerpo se puede librar de los condicionamientos mentales añadidos por una sociedad. Podemos y tenemos que disfrutar del sexo en nuestra ancianidad también, aunque aprendamos otros modos. No verlo como algo asqueroso, veo prejuicios en esto. En algunos centros de acojida para ancianos, se les niega esta posibilidad, cuando hay todavía sentimientos y ganas de tocar y disfrutar. Pero ves, hay que mirar siempre con más profundidad. Cada persona es un mundo, no se nos olvide esto.

Dicho budista: "Si cada uno barriera delante de su propia casa, el mundo estaría mucho más brillante"

Buena explayada, si señor :)
Un fuerte abrazo Cornelivs.

Gizela dijo...

Lindo Post, muy bello.
Y es cierto lo que escribes, pero,a veces las injusticias ganas, y hay ancianos nada amargados, que han sido olvidados en asilos u hospitales.
Cuando vivia en Venezuela, y los niños estaban en su colegio, cada Navidad el colegio organizaba un día en el asilo público para cada año de escolaridad.
Llevaban comestibles y regalos, pero recuerdo que mis hijos comentaban, que no le ponían mucha atención a los regalos, aun cuando los agradecían.
Lo que más disfrutaban era con las respuestas a las preguntas que les hacían, a sus charlas, es decir a la compañía.
Muchos de ellos, nunca recibían visita de sus familiares, simplemente fueron dejados ahí, como bulto que estorba.
Creo que todos los ancianos deberían tener el regalo de leerte.
Feliz fin de semana amigo a ti y tu familia
Besos
Gizz

Ginebra dijo...

Parece un buen libro... quizás me lo compre. Desde luego Cicerón era un sabio. Me gusta el concepto de que el deleite es para la juventud porque al viejo le distaería el alma, espero que no!!!!.
Es cierto que nosotros hacemos feo la vejez, y más en estos tiempos donde la belleza unida a la juventud parecen ser los únicos conceptos válidos. Deberíamos estar orgullosos de las arrugas y demás signos de vejez porque forman parte de lo ya vivido, del aprendizaje y representan la serenidad que dan los años, pero es tan difícil!!!!
Un beso y buen finde, Cornelivs.

Kuki13 dijo...

Preciosa reflexión la de la vejez placentera, y es cierto que a ella deberíamos llegar todos y saber sobrellevarla con dignidad, Jajajaja, pero juer como fastidia, y mas hoy en día cuando ves esas niñas/os, que es una gloria verlos, yo no se que comen, jajaja pero de verdad que da rabia, ver esos cuerpos perfectos, cuando nosotros empezamos a preocuparnos por las "arruguitas", Un saludo a todos.

Ronini dijo...

Como siempre acercándonos a la cultura, y como siempre invitándonos a la reflexión.

siempre recuerdo la serenidad de mi abuela viendo de cerca la muerte, con una sonrisa , que para algunos sería tétrica, para mí fue dulzura, porque como bien dices, quien ha vivido, espera la muerte,de forma tranquila, natural y honesta.

besos

María dijo...

Aquí estoy de nuevo, pensé que tenías un nuevo post, pero veo que estás descansando, bien te lo tienes merecido, no te preocupes por nosotros, que seguiremos cerca de tu blog, descansa todo el tiempo que puedas.

Un beso y feliz fin de semana.

Esther dijo...

hola! es verdad en la vejez se recoje todo lo que se ha hecho en la vida,tanto si se ha maltratado la salud de uno mismo con vicios acaban saliendo como errores cometidos y un sinfín de cosas..Para tener una buena vejez tenemos que tener una buena vida :)

Un beso

Anónimo dijo...

Hola amigo, te extrañé y extrañé el tiempo que me faltaba para deleitarme y sobre todo aprender de tí.
Que sabiduría, la tuya por transportarnos a esos conocimeintos y reflexiones. Si pudiéramos ver un poco de la vejez que nos aguarda seguro viviríamos más sanos este presente, de cuerpo y alma.
Besos sin pasado, con presente y mucho futuro

PABLO JESUS GAMEZ RODRIGUEZ dijo...

A MIS HABITUALES: Gracias a todos, amigos/as, por vuestros comentarios. Coincido en lineas generales con todos vosotros.

Creo que el libro no se dirige tanto a que el mundo adore a los viejos (pues lo viejo, como dijo alguno de vosotros, nadie lo quiere), sino mas bien A QUE EL ANCIANO TENGA PAZ INTERIOR.

A mi, la frase que mas me ha hecho pensar de Cicerón es esta:

"los necios atribuyen a la vejez sus propios vicios y su propia culpa, y la culpa NO es de la vejez, sino de ellos. Ni las canas ni las arrugas pueden obtener, así de repente, autoridad; mientras que la vida que se ha llevado con honestidad es la que recoge en los ultimos años los frutos de la autoridad. Es decir, se recoge lo que se siembra. Dice Cicerón que a los ancianos se les acusa de que son pesados, inquietos, iracundos y difíciles, y tambien avaros. Pero contesta inmediatamente que “esos vicios son propios de varias circunstancias que durante la vida han influido en las costumbres modelando tu carácter, pero no son vicios propios de la ancianidad.” Es decir, la vejez no es mala: somos nosotros la que los hacemos mala.

¿Quereis un buen consejo? Las proximas vacaciones leedlo, os alegrareis.

UN FUERTE ABRAZO

PABLO JESUS GAMEZ RODRIGUEZ dijo...

SILVIA GEMINI:
UNADE40:
KUKI13:

¡Bienvenidas! Ha sido un placer recibiros aquí. Muchas gracias por vuestra visita y por vuestros interesantes comentarios. Espero veros con frecuencia.

Un cordial saludo.

santero Delcolmo dijo...

Me gustó mucho esta entrada.
Quienes tuvimos la fortuna de disfrutar de nuestros propios abuelos, amamos a los ancianos.
Las arrugas dicen mucho acerca de la persona que la porta, en la frente, en las comisuras, en el entrecejo, en las manos.
Las huellas.
Un abrazo.

PABLO JESUS GAMEZ RODRIGUEZ dijo...

SANTERO:

Gracias amigo Santero. Te confieso una cosa: cuando yo era pequeño y me preguntaban a quien queria mas si a mi padre o a mi madre, yo siempre respondia: ¡A mi abuelo!. Y era verdad.

Otro abrazo para tí.

Anónimo dijo...

y sigue siendo necesario sentirse vivo

Silvia_D dijo...

Buenos días, niño y feliz domingo

Besos :)

AriaDna dijo...

Siempre veo en los ancianos una mirada de aguamarina con un brillo intenso

Un beso y feliz semana

alicia barajas dijo...

Hola Cornelius: sólo decirte que me ha gustado mucho tu blog... te enlazaré! Saludos: sinkuenta

amelche dijo...

Una interesante reflexión. Sobre todo, porque todos aspiramos a llegar a viejos. Así que, habrá que ir aprendiendo.

alicia barajas dijo...

¡Qué sabiduría encierran las palabras de Cicerón! y como retumban en este mundo hueco que nos ha tocado vivir... Un abrazo

Hada Saltarina dijo...

Hola Cornelius!
Te he conocido por el blog LA CUEVA DE SUSANA, y, a mi modo de ver, tu excelente comentario sobre el post de Rosa Luxemburgo.
Este texto me ha llegado al alma. Muchísimas gracias por escribirlo. Hoy en día parece que la vejez es un pecado y se huye de ella en vez de aprender a vivirla como una fase más de la vida.
Un saludo y felicidades por tu forma de expresar lo que piensas

Rita dijo...

Gracias por indicarme este post, me ha gustado mucho y me identifico con él. Es un tema que me preocupa mucho porque no todos sabemos vivir esta edad, con la alegría y empuje que se debe, yo lo intento cada dia y aunque el cuerpo nos va diciendo cuales son los limites, yo por mi parte no los pongo, siempre intento aquello que me gusta sin pensar nunca que no puedo. Y la verdad es que me sale bastante bien, estoy muy contenta de como vivo y de lo que soy, intentando siempre transmitir a otros mis experiencias, aunque no lo consigo siempre. Un abrazo amigo Cornelivs