"Cree a aquellos que buscan la verdad, duda de los que la han encontrado" (André Gide)
"No estoy de acuerdo con lo que dices, pero defendería con mi vida tu derecho a expresarlo" (Voltaire)

"La religión es algo verdadero para los pobres, falso para los sabios y útil para los dirigentes" (Lucio Anneo Séneca)
"Cualquier hombre puede caer en un error, pero solo los necios perseveran en él" (Marco Tulio Cicerón)
"Quien no haya sufrido como yo, que no me de consejos" (Sófocles)
"No juzguéis y no sereis juzgados" (Jesús de Nazaret)
. . .

19/06/2010

Premio o castigo

-¿Dices que somos inmortales?

-Lo afirmo porque asi lo creo.

-Entonces, si somos inmortales, ¿Qué sentido tiene venir a este mundo?

-Explicate mejor.

-Veamos. Segun tu fe, y para simplificar, venimos a este mundo para nacer, vivir un promedio de 80 años aproximados, transcurridos los cuales fallecemos, y según hayamos sido buenos o malos, es decir, segun hayamos cumplido o dejado de cumplir los mandamientos de tu religión, iremos al cielo o al infierno, ¿no es eso?

-Asi lo creo.

-Es decir, que para tu fe, en solo esos 80 años de vida terrenal, según el comportamiento que hayamos tenido aquí abajo, acorde o no con dichas normas, nos estamos jugando nada mas y nada menos, que la salvacion o condenación eternas, y además sin posibilidad de remisión, ¿no es eso?

-Asi es.

-Entonces esta vida en la tierra es como un examen, como una prueba que decide tu destino en la otra vida, de modo que el destino de nuestra vida inmortal nos lo jugamos solo en esos 80 años de vida terrenal y mortal ¿no es cierto?

-Por supuesto que si.

-Y después de nuestro paso por la tierra, según tu fe, la vida más alla es inmortal, es decir, no se acaba nunca, ¿no es cierto?

-No podías decirlo mejor.

-Pues a mi me parece que ese examen, o ese periodo de “practicas” en la tierra es demasiado corto, no dura mucho, ¿verdad? Es decir, ¿no te parece extraño, decidir solo en 80 años de existencia aquí, todo tu destino inmortal en la eternidad?

-Eso es lo que indica la fe.

-¿Y no te parece extraño? ¡Piensa un poco, por favor! Es como si yo le impusiera a mi hijo pequeño de 4 años una prueba: que se porte bien durante todo un dia. Que no ponga juguetes en medio, que sea obediente, que no chille ni de voces, y que no derrame ni una sola gota de leche cuando se beba su vaso antes de acostarse, o que no deje sus legionarios romanos de playmobil por en medio. ¡Un niño de 4 años es un niño de 4 años! Y solo por cometer fallos tan pequeños ¿lo voy a condenar a la cárcel durante el resto de su existencia?

-No es lo mismo. Además, la fe es la fe.

-Pero, insisto: ¿no te parece ilógico? ¿Es que Dios, suponiendo que exista, no tiene en cuenta nuestras limitaciones ni comprende nuestros defectos? Si es verdad que nos creó él, seremos sus hijos, de modo que debe conocernos más que nadie, ¿verdad? De lo contrario seria un Dios muy injusto, ¿no crees? ¡¿Qué clase de juez tan implacable condenaría a alguien con una pena tan pesada por un delito tan liviano?!

-Bueno, la libertad y la responsabilidad van aparejadas. Tienes libre albedrio, ¿no? Entonces si puedes optar por uno ú otro camino, tu eres responsable de tu decisión.

-¿Tu crees que un niño de 4 años es responsable de lo que elige?

-¡Por supuesto que no! Le falta madurez y conocimiento.

-Entonces, del mismo modo te pregunto: ¿tu crees que el hombre es plenamente responsable de su elección? ¿No es el libre albedrio un concepto puramente filosofico, un invento humano para coaccionar a los débiles de espiritu?

-Mmm...

-Con esa historia del castigo o del premio futuro, ¿no estas atentando contra la libertad del hombre? ¿No estas induciéndolo indirectamente a obrar? Es como si le dijeras: "haz lo que quieras, pero si optas por este camino ya sabes las consecuencias". ¡Es una coacción indirecta, no le estas permitiendo elegir libremente! Es artificioso y falso, ¿no crees?

-¡Soy libre para elegir! Y solo yo seré el responsable de mis actos.

-¡Volvemos a lo mismo de antes! ¡Ese niño de cuatro años, y solo el, sera el culpable de la pena de prision perpetua que le caera si pone juguetes en medio o derrama la leche! ¿No te parece excesivo? Veamos, ¿quien es mas bueno, un padre normal, o Dios?

-La respuesta esta en la mano: Dios.

-Un padre humano castigaria a ese niño a prisión de por vida por portarse mal un dia?

-¡Oh, no, seria un animal, un padre desnaturalizado! ¡Es demasiado cruel ese castigo!

-Y el que nos caerá a nosotros, segun tu fe, ¿no lo es?

Saludos.

18/06/2010

Encuentro con moriscos.

Los jueves leemos El Quijote.

Para el grupo de lectura del Quijote en La Acequia.

En este capitulo 2.54, los duques deciden seguir con su diversión hasta el final, de modo que ordenan que el desafío de D. Quijote al burlador de la hija de Dª Rodríguez siga adelante. No me sorprende que el “frustrado” yerno de Dª Rodríguez se hubiera ido a Flandes huyendo de su suegra, lo cual indirectamente nos informa de que esta mujer tuvo que ser “de armas tomar”, como suele decirse. Ante la ausencia del causante del agravio, los duques piensan en dar el cambiazo, sustituyendo al huido externo por un lacayo gascón: un tal Tosilos. Total, con echarle luego la culpa a los encantadores, todos contentos, no seria difícil convencer a D. Quijote. Ya lo sabemos por experiencia (Maritornes a quien D. Quijote toma por princesa, el encantamiento de Dulcinea, la “mutación” del rostro del caballero de los espejos, etc.)

Sancho Panza muestra mucho sentido común: ha aceptado y asumido su destino. Durante toda la novela tenía “encajado en los cascos” su obsesión por la ínsula: solo la experiencia le ha hecho madurar y le ha desengañado. Ahora ya acepta que él no es bueno para gobernar, “si no es un hato de ganado, y que las riquezas que se ganan en los tales gobiernos son a costa de perder el descanso y el sueño, y aun el sustento…”

Y nos lleva Cervantes de la mano hacia una tragedia social de aquella época: la expulsión de los moriscos. Sancho se encuentra con Ricote, un tendero morisco de su mismo lugar, que tuvo que partir.

Documentémonos un poco. Los moriscos fueron expulsados de España en el periodo de tiempo que oscila entre la aparición de la 1ª Parte (1605) y la de la 2ª Parte que estamos leyendo (1.615). El acuerdo de expulsión lo votó por unanimidad el Consejo de Estado el 30 de enero de 1608, y aunque en un primer momento sólo se aplicó a los moriscos valencianos, el 9 de abril de 1609 el Duque de Lerma firma el Decreto por el cual la expulsión se hacia extensiva a todos los reinos de España.

La población morisca, según la wikipedia, consistía en unas 325.000 personas en un país donde habia entonces unos 8,5 millones de habitantes. Estaban concentrados en los reinos de Aragón, en el que constituían un 20% de la población, y de Valencia, donde representaban un 33% del total de habitantes. A esto hay que añadir que el crecimiento de la población morisca era bastante superior al de la cristiana. Las tierras ricas y los centros urbanos de esos reinos eran mayormente cristianos, mientras que los moriscos ocupaban la mayor parte de las tierras pobres y se concentraban en los suburbios de las ciudades. Pero en Castilla la situación era muy distinta: de una población de 6 millones de personas, entre moriscos y mudéjares sólo juntaban unos 100.000 habitantes. Debido a este mucho menor porcentaje de población y a la positiva experiencia con los antiguos mudéjares, los cuales llevaban siglos conviviendo con la población cristiana, el resentimiento hacia los moriscos en la corona de Castilla era menor al de la población cristiana de la corona de Aragón. Parece que hacían mejores migas con los cristianos en Castilla que en Aragón y Valencia.

Por ello vemos a Sancho francamente agusto y relajado con la buena compañía de su amigo Ricote y sus compañeros: comen frugalmente y beben de las botas. Finalmente todos se duermen, excepto Ricote y Sancho, “que han comido mas y bebido menos”, y se cuentan los pormenores de sus vidas: Ricote relata como salio de España y las circunstancias de la salida y Sancho le informa como ha abandonado el oficio de gobernador.

Un capitulo muy interesnte, especialmente los detalles que ofrece Ricote sobre su salida de España. Pero esta expulsión escondía en la mayor parte de las ocasiones, auténticos dramas humanos. Cervantes, contemporáneo de los hechos, y testigo excepcional de estos acontecimientos, nos informa de primera mano. Y por cierto: ¿Qué pensaría nuestro insigne novelista de la expulsión de los moriscos?

Me inclino a pensar que Cervantes, al decir que la expulsión fue una “gallarda resolución” y opinar que entre los moriscos “algunos había cristianos firmes y verdaderos, pero eran tan pocos, que no se podían oponer a los que no lo eran, y no era bien criar la sierpe en el seno” alaba, o al menos comprende y/o justifica tal expulsión.

Pero acto seguido vemos su faceta humana, tiene muy en cuenta la tragedia que tuvieron que sufrir miles y miles de familias; lo veo enternecerse hablando de lo que los moriscos expulsados añoran a España, su patria, y nos conmueve magistralmente relatándonos el sufrimiento de los moriscos expulsados. Leamos al morisco Ricote:

“…Doquiera que estamos lloramos por España, que, en fin, nacimos en ella y es nuestra patria natural; en ninguna parte hallamos el acogimiento que nuestra desventura desea, y en Berbería y en todas las partes de África donde esperábamos ser recebidos, acogidos y regalados, allí es donde más nos ofenden y maltratan. No hemos conocido el bien hasta que le hemos perdido; y es el deseo tan grande que casi todos tenemos de volver a España, que los más de aquellos, y son muchos, que saben la lengua, como yo, se vuelven a ella y dejan allá sus mujeres y sus hijos desamparados: tanto es el amor que la tienen; y agora conozco y experimento lo que suele decirse, que es dulce el amor de la patria..."

Y también nos confirma que muchos expulsados eran cristianos, y que quizás pagaron justos por pecadores, escuchemos a Ricote: “…mi hija y Francisca Ricota mi mujer son católicas cristianas, y aunque yo no lo soy tanto, todavía tengo más de cristiano que de moro, y ruego siempre a Dios me abra los ojos del entendimiento y me dé a conocer cómo le tengo de servir”.

En resumen (y a salvo los expertos infinitamente más autorizados que yo) mi humilde opinión es que Cervantes está de acuerdo con la expulsión, pero no deja de comprender que fue una tragedia social, y quizás, leyendo entre lineas, nos quiera decir D. Miguel que fue una decisión demasiado dura; si no en el fondo, al menos en la forma en que se ejecutó.

Saludos.

17/06/2010

Silencio

Infinidad de veces se ha escrito en los blogs sobre que decir cuando no se te ocurre nada que decir, o como yo ahora: cuando no tengo tiempo ni para rascarme (perdonadme, queridos amigos y amigas, no os he comentado estos ultimos dias pero es que, os lo juro, estoy hasta arriba). Muchos bloggers han sentido esa obligacion de escribir, o se han visto compelidos a hacer la entrada del dia, o han reeditado entradas anteriores, a pesar de que las musas ese dia estaban de "permiso".

Me parece muy respetable. Que cada uno haga lo que desee.

Aunque yo lo tengo claro: no me gusta escribir por escribir, o hacerlo por obligacion. No. Hay que ser hijo de la libertad. Siempre he pensado que era mejor callarme cuando no tenia nada que decir o no se me ocurria nada; y he tenido muy presente siempre aquel viejo aforismo del sabio: "Cuando hables, procura que tus palabras sean mejores que el silencio”. No te sientas obligado/a a escribir.

Se libre, ante todo. Tus amigos y amigas, los que de verdad lo son, lo comprenderán y respetarán. Y si no escribes, aprende de ellos, visita sus blogs: cada uno de ellos tiene su propia experiencia que contar; se merecen tu respeto y tu aprecio, y recuérdalo: todos, absolutamente todos, tienen algo que enseñarte. Aprende de todos.

Obviedad de obviedades es todo lo escrito: por eso mismo, querida amiga que empiezas en esto de los blogs; no lo olvides. Acomódate, que el viaje es largo. Animo. ;)

Saludos.

14/06/2010

Arrugas

Ese fue uno de sus grandes errores, y quizás el peor de todos: era ya tan viejo que se le arrugó y acartonó no solo la cara sino tambien la mente; y los años fueron el mejor aliado para su comodidad. Perdió sus ganas de aprender, y quiso ganar autoridad a base de certezas de humo. Pensaba que ya se lo sabia todo y que estaba de vuelta de todo, y no se dio cuenta de que habia infinidad de sitios y lugares que sus pies jamás habian pisado.

Saludos.

13/06/2010

Prohibido

-Prohibemelo cariño.

-¿El qué?

-Por favor, prohibeme que deje de quererte alguna vez. Prohibeme que nunca me separe de ti.

-Te lo prohibo. ¿Me oyes? ¡Te lo prohibo!

Saludos.

12/06/2010

Corriendo bajo la lluvia

El sábado es un dia estupendo, pues los niños no tienen colegio, y nosotros no trabajamos, con lo cual podemos comer todos juntos y lo pasamos bien. Tras la comida, me marcho a la cama y me duermo una breve siestecita, con la idea de levantarme para correr a ritmo de footing mis 8,5 km. diarios.

Dormida la siesta, me levanto sobre las 16,00 horas y cuando voy a salir a la calle me llevo una agradable sorpresa: esta lloviendo. No es una lluvia muy intensa, pero si fina y persistente. La he saludado con alegria, y con el ánimo bien dispuesto me he ido a correr, pero sin chubasquero ni paraguas ni nada, son un estorbo. He salido (como tantas veces) solo provisto de mis pantalones cortos negros, camiseta de manga corta negra y zapatillas de deporte.

Maravilloso, insuperable, estupenda sensación. Normalmente todos los dias me cruzo con otras personas que corren como yo, o caminan. Pero hoy la lluvia ha hecho que haga todo el trayecto solo. En completa soledad, corriendo bajo la lluvia en medio del mar de olivos, con ese agradabilisimo olor a tierra mojada y a vegetación primaveral, he disfrutado enormemente, esto ha sido un auténtico regalo de los dioses. Cuando regresaba por el Canónigo, y ya se veia Jódar a lo lejos, la lluvia ha apretado un poco, de modo que he vuelto a casa completamente mojado, pero feliz. He tardado 48 minutos en recorrer los 8,5 Km. Para mi, bien.

Marcho directamente a la ducha, de la cual salgo nuevecito flamante, y con una indescriptible y placentera sensación de bienestar. Os explicaré que para aquellos que hacemos deporte la sensación de sentirnos bien, la vitalidad y la alegría que esto produce cuando lo practicamos tiene una explicación bioquímica, pues las endorfinas naturales que produce nuestro propio cuerpo cuando hacemos deporte adquieren un papel protagonista: son las causantes últimas de esta sensación tan agradable. Ha estado chulo.

¿Quien se anima un fin de semana a correr conmigo?

Saludos.

10/06/2010

¡Adiós, verdugos...!

Los jueves leemos el Quijote.

Para el grupo de lectura del Quijote en La Acequia.

Se acabó por fin el gobierno de Sancho, que ya estaba harto de pasar hambre y de dar opiniones y pareceres. En este capitulo 53 llega a su último término la crueldad de los burladores, de estos bellacos dirigidos por los malditos duques.

Si he de ser sincero, me he sentido aliviado leyendo el final del gobierno de Sancho porque representa el final de sus fatigas y de sus innumerables pesares. Y es que el pobre, desde que llegó a su “insula” no ha tenido ni un momento de sosiego.

Se conoce que como Sancho es mas sensato e inteligente de lo que habian previsto, y como no saben como despacharlo, inventan el suceso de la guerra con los invasores de la insula para procurar de una vez que el gordito escudero se marche. Y desde luego, lo consiguen.

Sabiamente decide volver a su vida anterior y por fin podemos los lectores respirar tranquilos: sus verdugos no se van a reir mas de él. Ya era hora. Sancho los manda a paseo: ¡adiós, verdugos! Ahora reiros de otro. Y Sancho, que comprende y digiere la experiencia, añora su pasada libertad dándose cuenta de las incomodidades que trae la soberbia y la ambición. Cervantes hace aquí un cántico a la vida sencilla y Sancho acude a ver a su rucio, a quien besa (podemos verlo en la inolvidable imagen de Gustavo Doré, arriba a la izquierda), y emocionándose, le dice:

“…después que os dejé y me subí sobre las torres de la ambición y de la soberbia, se me han entrado por el alma adentro mil miserias, mil trabajos y cuatro mil desasosiegos”.

Yo tambien me emociono imaginándome la escena. Recordemos que Sancho, en el fondo (y a pesar de sus defectos) es un bonachón a quien gusta la vida sencilla. Jamas de los jamases se ha olvidado de su rucio, de su alhaja, de su mejor amigo, hemos tenido ocasión de comprobarlo en toda la obra. A continuación, cuando se sube sobre el rucio, hace un discurso que siempre me ha fascinado y que, en mi humilde opinión, es un compendio de sabiduría.

“…bien se está cada uno usando el oficio para que fue nacido. Mejor me está a mí una hoz en la mano que un cetro de gobernador, más quiero hartarme de gazpachos que estar sujeto a la miseria de un médico impertinente que me mate de hambre, y más quiero recostarme a la sombra de una encina en el verano y arroparme con un zamarro de dos pelos en el invierno, en mi libertad, que acostarme con la sujeción del gobierno entre sábanas de holanda y vestirme de martas cebollinas. Vuestras mercedes se queden con Dios y digan al duque mi señor que desnudo nací, desnudo me hallo: ni pierdo ni gano; quiero decir que sin blanca entré en este gobierno y sin ella salgo, bien al revés de como suelen salir los gobernadores de otras ínsulas…”

Incluso contesta con mucha prudencia a los que le piden que dé cuentas de su gestion; pero lo que más me sorprendió fue la prudencia de Sancho (a pesar de lo rustico que es) en la contestación que le dio al Dr. Pedro Recio. Otro en su lugar quizás no se hubiera contenido tanto.

El mismo Sancho, con su prudencia, se ha retratado: un gobernador decente, con principios éticos y morales, que no se lleva ni un céntimo de su gobierno; que por fin parece que se conoce a si mismo; y que comprende, porque lo ha experimentado en carne propia, que “por su mal le nacieron alas a la hormiga”.

Saludos.

09/06/2010

La derrota

He jugado. Y he perdido. Duele la derrota, ya lo creo que duele. Pero, si bien es cierto que he vuelto del frente con heridas, y derrotado, lo hago con la frente alta. Ya se sabe: no hay hombres perfectos, sino intenciones perfectas. Pero al menos he luchado, he tenido agallas para enfrentarme. No como tu: siempre criticas a los que pierden, pero nunca has tenido cojones para combatir. Solo los que luchan pierden. Solo los que juegan la partida, los que se atreven a jugar, pierden. Y ¿sabes lo que te digo? Que doy gracias a los dioses porque me dieron animo para luchar, aunque perdí. Pero le eché agallas a la vida: no me quedé quieto. La experiencia me enseñó.

"El soldado mas bien parece muerto en la batalla, que vivo en la fuga", dijo Cervantes. Y llevaba razón, ahora lo comprendo. Me ves derrotado y herido, pero mis heridas son el espejo de tu cobardía. Tu te sientas a hacer punto, como las comadres en la Place de la Concorde, en pleno 1.789, cuando veian caer las cabezas en la guillotina para matar su anorgasmia y su hastio, ¿verdad?



En el pecado llevas la penitencia. Lástima te tengo: tu nunca sabrás lo que es eso, tu nunca seras protagonista de nada: solo un ácido espectador. No sabes construir: solo destruir. Y encima eres envidioso: no puedes tolerar tu propia mediocridad, te resulta insoportable: por eso destruyes y arrojas ácido al rostro de quien tiene narices suficientes como para atreverse a algo grande, aunque caiga en la lucha, ¿verdad?

Tienes lo que te mereces. Y si, ya lo creo: en el pecado llevas la penitencia.


Saludos

08/06/2010

Finitud

En mi humilde opinión, una de las mas sabias y excelsas leyes de la naturaleza consiste en nuestra propia finitud: todo lo que comienza ha de terminar, de modo que un buen dia partiremos de aquí. Venimos a este mundo desnudos y nos marcharemos de igual forma, de modo que por mucho afán por tener y por atesorar que tengamos ("¡el dinero tenia que ser como los ajos!" decian los viejos, y yo estoy de acuerdo con ellos) no nos podremos llevar nada de aqui, absolutamente nada: ni dinero, ni acciones, ni vehículos, ni yates, ni ningún bien material. Asi es. Ni siquiera la ropa física que le colocan al cadáver hará el viaje: se quedará aquí, como nuestro cuerpo, hasta que se pudra todo.

Así son las cosas, nada nuevo hemos descubierto. Pero una cosa es saber y otra cosa asumir. Porque si todos sabemos esto, ¿Por qué actuamos como si fuéramos eternos, como si no lo supiéramos o no quisieramos saberlo, o como si nunca nos fuera a llegar nuestra hora? Pasamos de puntillas sobre razonamientos como este, porque nos incomoda enormemente. Y lo cierto es que, quizás a veces, en un minuto solo de tiempo de razonamiento puede estribar la diferencia entre una vida vana y otra vida completa.

-Todo eso ya lo sabemos.

-¿Seguro? ¿Realmente lo sabemos?

-¿Entonces que hacemos, nos abandonamos al catastrofismo?

-No, todo lo contrario. Abramos los ojos del espíritu y demosle importancia a las cosas que realmente la tienen. Merece la pena vivir una vida plena y poner en práctica lo que decimos que sabemos. Que extraño: el hombre lleva miles de años muriéndose; deberiamos de tener ya experiencia, pero parece que somos duros de oido.

Saludos.

07/06/2010

¡Enhorabuena, campeón...!

¡¡¡Lo volvió a hacer!!! Este chico mallorquín ha vuelto a hacer que el tenis español brille a la mayor altura posible. Ha recuperado su trono, como Rey de la tierra batida, trono que solo las lesiones (no los adversarios) le pudieron arrebatar. Volví a emocionarme ayer, como no. Disfruté enormemente de la victoria de nuestro campeon, y como español y como aficionado al deporte me recocijé lo indecible, y aún mas por los estúpidos deslenguados de los que hablaré luego.

Rafa Nadal vuelve a ser el numero 1 del mundo. Ahí está; de nuevo el Rey Nadal se pasea por Paris. Ojead la prensa escrita, toda se rinde hoy a Nadal.

Y ello a pesar de esos pocos (afortunadamente) comentaristas de la prensa escrita; a pesar de esos otros estúpidos especialistas en nada y amantes de la critica inmisericorde (que los dioses nos libren de ellos) y sobre todo, y por último, a pesar de tanto y tanto chismoso vomitivo de esta España profunda y harto envidiosa que suele sentarse en la plaza a ver como caen los grandes, y que ahora lo alaban, pero que hasta hace pocos dias no dudaban en criticarlo y negar a Nadal cualquier posibilidad de volver al cenit del tenis mundial; que no cesaban de decir que estaba "acabado", que era un "matado"; que su futuro en el tenis habia terminado.

Brindo de todo corazón por tí, chico. ¡Felicidades campeón...!

Saludos.

03/06/2010

Jugando al escondite

El no ha cumplido aún los cinco años, pero he de reconocer que me hizo sudar de lo lindo.

-“¿Papi, jugamos al pilla-pilla?”

Para mi fué una sorpresa muy agradable. Y además como me lo preguntó con esa sonrisa suya indescriptible, imposible negárselo. Y ahí estaba yo, anoche, un poquito antes de la cena, con la baba caída, persiguiendo a Pablo Jesús, mi tocayo, el menor de mis tres hijos. Me lo puso difícil, el crio corre como el viento. Correteamos por todas las habitaciones de la casa, de la suya al pasillo, luego a la cocina, al patio, se pasaba al otro piso, archivo, pasillo, despacho, habitaciones, directo a su habitación y vuelta a empezar. Pícaro de él, cerraba las puertas a su paso, o me ponía obstáculos. Su risa era abierta, ruidosa, franca, espontánea, sincera. Detrás de él iba yo, desempeñando el papel del ogro haciendo ¡Grr…! y cosas asi.

Cuando dimos cinco o seis vueltas, mi hijo, ya cansado, aunque sin cesar de reir, me dice:

-"Papi, para. Ahora jugamos al escondite, ¿vale?"

Pues vale, estupendo. Lo agradecí, ya lo creo. El sitio preferido para esconderse es su pequeña casita de Imaginarium, que tenemos instalada en el patio (alli tiene sus juguetes y a mis queridos legionarios romanos de playmobil, mezclados con los piratas -sus preferidos- y con los soldados del séptimo de caballería). Yo finjo que nunca me doy cuenta de que esta alli, alargo voluntariamente la búsqueda, y hago el tonto hasta que su risa lo delata.

-"¡Papi, que estoy aquí…!"

Sale de la casita con la mirada iluminada. Percibo en el la alegria de la niñez, el gozo puro y sencillo de un niño que juega con su padre; que aún no conoce el mundo; que es dueño del tesoro de la inocencia. Me miró. Algo debió de notar en mi mirada porque, de pronto, y sin venir a cuento, viene corriendo hacia mi y me da un abrazo. Me conmovió especialmente ese abrazo, porque a los breves instantes, una solitaria lágrima resbaló por mis mejillas. Yo no tuve esa suerte, pero me siento feliz de que mi hijo esté gozando de una infancia feliz. Y ahora, que por fin está descubriendo la figura paterna, lo noto mucho más cercano a mí.

Os puedo jurar que disfruté enormemente. Fue un rato delicioso que no olvidaré: quieran los dioses que se repita muy a menudo.

Saludos.

01/06/2010

¡Sordos...!

¿Que decir ante los terribles últimos acontecimientos (haced clik) que con tan buen criterio, como siempre, analiza nuestro amigo Pedro Ojeda?

"No hay camino para la paz: la paz es el camino" (Gandhi).

Quien tenga oidos para oir, que oiga. Si quieren, claro, que no querrán.

Deberia de darles verguenza...

31/05/2010

¡Ciegos...!

-Estamos ciegos.

-No hombre, no exageres.

-No exagero. Estamos ciegos, y salvese el que pueda. Porque...¡hay que ver que mundo este más estúpido...! Para cuatro dias que estamos aquí…¡como nos gusta jodernos los unos a los otros!

-Si; pero lo malo es que nos damos cuenta cuando ya es demasiado tarde.

-Aquí falla algo.

-¿El qué?

-No se; la persona individual lo tiene claro. Pero, ¿y el mundo?

-Me recuerdas a Ortega: “el individuo piensa, la masa no”. Yo no lo tengo claro, porque, al fin y al cabo, ¿no es el mundo un conjunto formado por millones de personas individuales?

-Uff, que lio.

-Yo no creo que sea cuestión de ceguera, sino de egoismo/materialismo. Somos ciegos porque queremos serlo: recuerda que el mejor ciego es el que no quiere ver.

-Eso es maldad.

-¿Y ahora te enteras?

Saludos.

29/05/2010

Flor de olivo

Ocho de la mañana. Los mios aún estan durmiendo. Me levanto en este sabado tranquilo, con un cielo completamente despejado y profundamente azul, y doy un corto paseo a las afueras de Jódar.

Lo veo: un manto amarillo se ve a lo lejos, cubriendo la superficie verde formada por el mar de olivos. El paisaje es precioso: millones y millones de olivos están en proceso de plena floración, y el polen del olivo, de color amarillo fuerte, flota en la atmósfera.

Esas flores luego se convertirán en aceitunas, y éstas en el oro verde de Andalucia: nuestro aceite. No olvidemos que mi provincia, Jaén, es la primera productora del mundo de aceite de oliva.

Paz, sosiego, relajación: en medio de la inmensidad me he sentido bien. Como un niño en el regazo de su madre.

¡Como me gustaría que vieseis esto...!

Saludos.

28/05/2010

¡Este gobierno se acaba...!

Los jueves, Quijote.

Para el grupo de lectura del Quijote en La Acequia.

En este capitulo 51, El Dr. Pedro Recio sigue haciendo pasar hambre a Sancho, es obvio que los duques-verdugos lo van a hacer sufrir hasta el final. Sancho maldice su gobierno, yo creo que ya está completamente harto de pasar necesidad. Cervantes nos lo dice muy claro: “Con esta sofistería padecía hambre Sancho, y tal, que en su secreto maldecía el gobierno, y aun a quien se le había dado”.

Pero no por ello abandona Sancho su talento natural, el dilema del puente -que le plantean- es solucinado muy satisfactoriamente, porque se acuerda en el mejor momento del consejo que le dio D. Quijote: Que en caso de duda, se atuviera a la misericordia, que no es mejor la fama del juez riguroso que la del compasivo. Es curioso, pero esa frase se me quedó tan grabada que en algun alegato en alguno de mis juicios -sobre todo penales- la he usado, os lo juro, dado que es un claro antecedente de la presunción de inocencia y del principio "in dubio pro reo", y del principio general del derecho segun el cual siempre es preferible absolver a un culpable que condenar a un inocente. Me llamó mucho la atención que en aquella epoca de terrible Inquisición, de quema de herejes y de brujas en las plazas publicas, hubiera quien ya anticipara nuestro magnifico logro constitucional: la presunción de inocencia. Ello demuestra, una vez mas, la inteligencia y el talento de nuestro buen hidalgo manchego y el animo compasivo y misericordioso de nuestro universal escritor.

El cerco contra Sancho se va cercando: vemos que esto se acaba, parece que tenian pensado rematarle del cargo de gobernador aquella misma noche.

Por otro lado, la lactura de las cartas que se cruzan escudero y caballero se me antoja, sencillamente, deliciosa. Ambas son extraordinarias.

En la carta de Sancho a D. Quijote se ve que el gobernador es y será siempre fiel a D. Quijote, se queja de que pasa hambre, dice que apenas tiene tiempo para nada…en fin, una carta que no revela que Sancho sospeche nada. Eso si: por mucha hambre que pase, tenia tantas ganas de gobernar que le pide a D. Quijote que no se enoje con los duques, no sea que tal enojo vaya a redundar en su perjuicio. El interés, al fin y al cabo.

Pero si me dais a elegir, prefiero la carta que D. Quijote envia a Sancho. D. Quijote es muy consciente de que Sancho es su escudero, y es sincero con el, sabe que es hombre de pueblo y no renuncia a seguir adoctrinándolo, es maravilloso el inicio: cuando esperaba oír nuevas de tus descuidos e impertinencias, Sancho amigo, las oí de tus discreciones, de que di por ello gracias particulares al cielo, el cual del estiércol sabe levantar los pobres, y de los tontos hacer discretos…vístete bien, que un palo compuesto no parece palo...”

Pero atención, creo adivinar que la duda sigue rondando el ánimo de Alonso Quijano: es como si D. Quijote no las tuviera todas consigo, o no terminara de creerse del todo el éxito de Sancho como gobernador, pues el lapidario final de la carta me lo da a entender:

“Y a Dios, el cual te guarde de que ninguno te tenga lástima”.

En fin, nada es eterno, y Cervantes, sin misericordia, nos lo relata de modo inexorable:

“Juntándose los burladores de Sancho, dieron orden entre sí cómo despacharle del gobierno”.

Señoras y señores, el gobierno de la insula se acaba.

Saludos