Muchos textos ha leido Cornelivs sobre el origen del Cristianismo y sobre la base histórica de esta confesión religiosa, empezando por la Biblia, que he leido en su integridad (del Genesis al Apocalipsis) en más de una decena de ocasiones, y muchos de sus pasajes los he repasado y estudiado durante muchos años.
Ya habia leido otros muchos libros más, como los de Gomez de Orbaneja, Diaz Alegría, Sanchez Dragó (“Carta de Jesús al Papa”) o al siempre magistral y extraordinario Karlheinz Deschner, entre otros. Pero hace pocos días he tenido la inmensa suerte de terminar de leer otro libro, no menos interesante: “El catolicismo explicado a las ovejas", de Juan Eslava Galan, cuya portada os traigo hoy. No me pregunteis de donde he sacado el tiempo. Ni yo mismo lo sé.
En mi opinión, éste es uno de los libros más buenos y más inteligentes que he leido en mucho tiempo, cuya lectura os recomiendo encarecidamente. Está muy bien documentado y fundado, con un riguroso y exhaustivo análisis histórico de los hechos. No va contra nada ni contra nadie. Juega a decir la verdad, a investigar y dar a luz la verdad historica de los hechos. En mi opinión es un libro honesto.
Cuenta las cosas como históricamente fueron, le pese a quien le pese, adobado todo ello con una fina ironía que despertará vuestra sana sonrisa en más de una ocasión.
Ya habia leido otros muchos libros más, como los de Gomez de Orbaneja, Diaz Alegría, Sanchez Dragó (“Carta de Jesús al Papa”) o al siempre magistral y extraordinario Karlheinz Deschner, entre otros. Pero hace pocos días he tenido la inmensa suerte de terminar de leer otro libro, no menos interesante: “El catolicismo explicado a las ovejas", de Juan Eslava Galan, cuya portada os traigo hoy. No me pregunteis de donde he sacado el tiempo. Ni yo mismo lo sé.
En mi opinión, éste es uno de los libros más buenos y más inteligentes que he leido en mucho tiempo, cuya lectura os recomiendo encarecidamente. Está muy bien documentado y fundado, con un riguroso y exhaustivo análisis histórico de los hechos. No va contra nada ni contra nadie. Juega a decir la verdad, a investigar y dar a luz la verdad historica de los hechos. En mi opinión es un libro honesto.
Cuenta las cosas como históricamente fueron, le pese a quien le pese, adobado todo ello con una fina ironía que despertará vuestra sana sonrisa en más de una ocasión.
Obviamente, los ortodoxos recalcitrantes pondrán el grito en el cielo una vez más. Pues que no lo lean. Pero frente a ello cabe aducir que, afortunadamente, en un estado de derecho, libre y democrático, cada uno tiene derecho a leer los libros que le de la gana, con mente abierta, y máxime si se hace con la sana intención de buscar la VERDAD, este donde esté, y le joda a quien le joda. Bienvenido, pues, este libro, como un granito de arena más que colocar en la pirámide de la verdad.
Veamos la critica. Según el periodista digital (haced click), el libro, presentado en Madrid en Febrero pasado, es un irónico, satírico, irreverente y, a veces, ácido recorrido por los orígenes del cristianismo, los Evangelios, los manuscritos de Qumrán y los dogmas. El autor utiliza el humor y la anécdota para ofrecer su peculiar visión de algunos episodios de la Biblia, y sobre las narraciones e interpretaciones que se han venido haciendo del hecho histórico del nacimiento de Jesús hasta nuestros días.
Así, en el "introito" del libro, se declara católico y apostólico, para agregar, con ironía, que viene observando "con creciente desasosiego, que muchas ovejas de la grey cristiana abandonan su aprisco", prescinden del director espiritual y descuidan los sacramentos para limitarse a practicar "un catolicismo tibio y acomodaticio o directamente no practican nada".
La verdad, agrega, es que somos cristianos "por pura rutina, por mero acomodo social, porque hemos nacido aquí, en la católica España, en la nación predilecta del Sagrado Corazón de Jesús y de la Inmaculada"..."Precisamente por eso parece mentira que seamos tan dejados en la práctica de nuestros deberes religiosos".
En el libro, dice Eslava Galán, "constataremos que el Jesús histórico, el devoto judío que sanó, exorcizó y 'prodigió' por los caminos de Tierra Santa, guarda escasa relación con el Cristo ideado por san Pablo, el verdadero inventor del cristianismo". "Vamos a comprobar que el primer siglo de cristianismo silencia la figura histórica de Jesús. Sólo muchos años después de su muerte se redactan escritos, a menudo contradictorios y plagados de fantasías, que narran su vida y milagros".
En la Iglesia, añade, se impone la visión de san Pablo para el que Jesús, "ahora llamado Jesucristo, es Dios mismo, la entidad que habita en el Reino de los Cielos, el Ser Supremo".
Y el autor va distinguiendo en cada episodio que reescribe, "entre Jesús (figura histórica) y Cristo (el Jesús versionado por san Pablo". Pablo -afirma- "habla de Cristo y apenas menciona a Jesús, el de carne y hueso, el que llevaba en sus sandalias el polvo de los caminos de Judea, de Galilea y el barro del lago de Tiberiades "le interesa poco o nada".
"Fábulas, mentiras, falsificaciones...¿sobre esos cimientos se fundamenta el cristianismo?". Sí, admitámoslo, que dejará sin argumentos a los contumaces hipercríticos", responde el autor. "¿Que el cristianismo se basa en una sarta de mentiras y supercherías? Vale, es cierto, ¿qué pasa? Será todo mentira, pero, a pesar de ello, la Iglesia católica resiste incólume los embates del vendaval de la historia, los cataclismos de las edades que sepultan imperios y los condenan al olvido".
La obra, editada por Planeta y que finaliza con un capítulo dedicado a los ángeles y los demonios, completa sus 500 páginas con 13 apéndices, donde explica algunas teorías sobre el origen de las religiones, la religión y "los alucinógenos", las fuentes que hablan de Jesús, los milagros y la "confusa" historia de la Magdalena. También sobre las herejías cristianas, las vírgenes consagradas en la Iglesia, las reliquias, los Santos Lugares, la iglesia del Santo Sepulcro, los manuscritos de Qumrán y "dos problemas eucarísticos tratados frívolamente por la prensa: las tribulaciones de los celíacos y las hostias con fecha de caducidad".
Saludos.