03/07/2025
Una muy buena pregunta
02/07/2025
¿Que es realmente nuestro?
Apreciados amigos.
Recordareis el tema de conversación que mantuvimos ayer, nos preguntábamos como es posible que tengamos miedo a perder algo, cuando lo cierto y verdad es que nada en este mundo nos pertenece realmente. Vivimos convencidos de que poseemos cosas: una casa, una esposa e hijos, nuestro trabajo, incluso creemos que nuestro cuerpo tambien es nuestro. Pero, como recuerdan los sabios que nos precedieron, esta idea es una ilusión que nos engaña, pues realmente nada es nuestro, ni las personas que amamos, ni el lugar donde vivimos, ni los bienes que poseemos; ni siquiera el cuerpo que tenemos, pues éste solo es un prestamo que el universo nos ha hecho por un tiempo limitado, y cuando partamos de aqui, aqui se quedará, pues devolveremos hasta el último átomo que lo compone. Esta es la visión estoica, y yo la comparto tambien; el mundo siempre ha confundido lo transitorio con lo eterno, y asi sigue sucediendo hoy. Todo lo que creemos que tenemos realmente nos ha sido prestado por un tiempo, muy determinado, cuya duración es incierta (no sabemos cuando acabará). Aun así, nos empeñamos en aferrarnos a todo como si fuera eterno, y el miedo a perderlo se convierte en fuente de sufrimiento.
En cuanto al origen de ese sufrimiento, según Marco Aurelio y Seneca, el dolor surge de esa confusion (lo transitorio/lo eterno) que siempre ha existido en el mundo. Cuando creemos que algo nos pertenece para siempre, la posibilidad de perderlo se vuelve una amenaza constante. Y nada es eterno, lo cual conecta directamente con la impernanencia de todas las cosas (uno de los puntos clave de la sabiduría budista, junto con el de la "atencion plena"). Por si fuera poco, ese sufrimiento se agrava porque tenemos otro miedo mas: el miedo a la muerte, nos cuesta enormente aceptar que todo lo que tiene principio, tiene fin.
Estamos muy equivocados. Creemos que vamos
a estar para siempre aqui, y que todo va a ser siempre "nuestro", y
generación tras generacion seguimos cometiendo ese error. Por ello,
si aceptamos que nada es permanente, que todo (TODO) se acaba, esa angustia
podemos convertirla en paz interior.
Pensemos un poco sobre esto. Os pregunto: ¿Qué es realmente mio? ¿Qué es realmente vuestro? Los
estoicos nos enseñaron a dejar de mirar tanto lo transitorio y centrarnos en lo
esencial. Lo único que verdaderamente es nuestro y que nos pertenece son
nuestro carácter, nuestras elecciones y la paz con la que decidimos afrontar lo
que no podemos controlar. “Aquello que te pertenece, nadie puede quitártelo”,
explicaban ya los estoicos con firmeza.
Yo creo que este pensamiento es una invitación a reconectar con uno mismo, a dejar de buscar seguridad en lo externo y volcar la atención hacia lo que sí depende de nosotros. La libertad viene a través de la “aceptacion”, que para mi es una liberación. Ahí esta la libertad, núcleo del pensamiento estoico: “nuestra libertad comienza exactamente en el momento en el que dejamos de luchar contra eso: contra la realidad”. Las cosas son como son, no como nosotros quisiéramos que fueran. Por eso, aceptar que nada ni nadie nos pertenece no es una resignación ni una rendicion, sino una liberación. Es una forma de reconciliarse con la naturaleza cambiante de la vida y vivir con más ligereza, menos miedo y mayor conexión con el presente.
Soltar esa ilusión de control no es perder, sino ganar perspectiva y libertad. ¿Os imagbinais el sufrimiento que nos traeria un miedo a perder las cosas que fuera eterno y que nunca se acabara? Séneca diría: “Todo es prestado” “nada es realmente tuyo”. El sabio se prepara para devolverlo todo sin lamento, pues sabe que en realidad no lo poseía en absoluto. Séneca no lo expresa en una única frase exacta, pero estas tres ideas lo comunican de forma radical: el sabio (I) usa todo como un préstamo (II) no apalanca su tranquilidad sobre lo efímero de las cosas, y (III) sabe que el miedo nace del apego a las cosas, a las personas y a las situaciones.
Temino
con palabras de Marco Aurelio y Seneca:
Marco Aurelio. Meditaciones
5.15 “Ninguna de estas cosas debe ser llamada ‘del hombre’, a las
que no pertenecen al hombre como tal… Considera que son un préstamo, no algo
que te pertenezca en propiedad. Cuando la Fortuna da regalos, en realidad solo
los presta, y nadie puede reclamarlos como propios.”
Meditaciones 2.14 “Recuerda que
no se pierde otra vida que la que uno vive, ni vive otra que la que pierde… El
presente es lo único que tiene, y no puede perderse lo que no se tiene.”
Meditaciones 4.47 / 4.50 “No
desprecies la muerte… ¿qué diferencia hay entre quien vive tres días y quien
vive tres generaciones?”
Meditaciones 7.27 “No sueñes con lo que no
tienes; más bien considera lo que tienes como tus mayores bendiciones, y piensa
cuánto las echas de menos si no las tuvieras… pero sin valorarlas tanto que te
remuevan si las pierdes.”
Meditaciones 9.32–33 / 9.35–36 “Todo lo
que ves perecerá pronto… La pérdida no es otra cosa que cambio, y la naturaleza
universal gusta del cambio; de ella procede todo lo que es.”
Seneca:
“Es más soportable no haber poseído jamás
nada que haberlo perdido… el pobre es más alegre que el rico, porque la pobreza
no tiene nada que perder.”
“El sabio considera chatarra todo lo que
la Fortuna pueda arrebatarle; lo vive como prestado, dispuesto a devolverlo
alegremente cuando se lo reclamen… vive como si todo le fuera prestado.”
"Lo que se tiene puede
arrebatársenos, pero lo que ya se ha disfrutado, nunca. (…) Todo lo que tenemos
puede perderse… Limita tus deseos y así curarás tus temores.”
"Deja de esperar y dejarás de temer.’
Esperanza y miedo son hermanos; el miedo sigue a la esperanza… enviamos la
mente al futuro y así distribuimos sufrimientos.” Lo dado también puede ser
quitado.”
“Algunos viven ansiosos, porque temen
perder lo que les da alegría. (…) Nada que venga del azar es estable; cuanto
más alto está, más propenso a caer.”
"¿Y por qué incluso sus alegrías
están llenas de ansiedad y temor? Porque no se basan en causas firmes, sino que
se agitan tan sin fundamento como surgieron. ¿Y qué clase de tiempos crees tú
que serán aquellos que ellos mismos reconocen como miserables, si incluso las
alegrías que los exaltan y elevan por encima de los demás no son en absoluto
puras?
"Todos los mayores bienes son fuente
de inquietud, y nunca se debe confiar menos en la fortuna que cuando parece más
favorable. Para conservar la prosperidad, se necesita aún más prosperidad, y
por cada deseo que se ha cumplido, es necesario elevar nuevos ruegos.
"Todo lo que nos llega por azar es
inestable, y cuanto más alto asciende, más propenso está a caer.
"Además, lo que está destinado a
perecer no puede brindar verdadero placer a nadie. Por tanto, es muy desdichada
—y no solo breve— la vida de aquellos que trabajan arduamente para conseguir lo
que deberán esforzarse aún más por conservar.
"Con gran fatiga alcanzan lo que
desean, y con ansiedad mantienen lo que han alcanzado; mientras tanto, no
prestan atención al tiempo, ese que nunca volverá.
"Nuevas ocupaciones reemplazan a las
antiguas, la esperanza da paso a nuevas esperanzas, la ambición conduce a
nuevas ambiciones…"
Que esteis bien.
Y por cierto, muchísimas gracias por estar
siempre ahi, y por esos caracoles y esas manitas de cordero... estaban
deliciosas.
Saludos cordiales.
18/06/2025
El mejor consejo que puedo darte
Mi consejo es que este verano, siempre que puedas, nades contra corriente y me explico: no sigas la senda de la mayoría, no busques fuera de ti, sino dentro de ti; no busques fuera de ti cosas como dinero, poder, belleza, fama, éxito, y demás cosas efímeras y caducas que el tiempo se lleva. Mas bien busca las respuestas dentro de ti, quiérete a ti misma un poco, y veras como te encuentras con una muy grata sorpresa que, poco a poco, irás descubriendo.
En ningun sitio encontraras mejores consejos que en las obras de Séneca, y precisamente ese es el mejor consejo que te puedo dar: que leas sus obras. Lee, relee, medita, piensa y repiensa sus sabias palabras: son una luz en medio de la oscuridad de la vida. Sois muy jovenes, teneis toda la vida por delante, y ahora el mundo es otro: estan de moda los "influencers", las redes sociales y demas galerias de personajes de este tipo, se prefiere una vana conversacion antes que cultivar la riqueza interior; y hasta parece que nos da miedo estar a solas con nosotros mismos, de modo que esto quizas os parezca muy extraño, pero fijaros, despues de dos mil años la gente sigue leyendo a Seneca: ¿Por que? Pues por algo será, y os invito a que lo descubrais por vosotros mismos. Quizás hayais pensado muchas veces que la vida es injusta, que es una tragedia que pasen cosas malas a las personas buenas, y que si Dios existiera no permitiria mas de cuatro cosas. Si, y no solo vosotros lo ha pensado: todos alguna vez hemos pensado eso y de hecho Seneca ya lo hizo. Con él hallareis consuelo, todo el que lo lee es como el que navega en la oscuridad de la noche y encuentra la luz que lo guia.
¿No me crees? ¡Compruebalo por ti mism@! Por ejemplo, si lees “De la divina providencia”, te encontraras párrafos como estos:
“¿Por qué el destino acosa a los
buenos con dificultades? Porque es propio del buen general enviar a los
soldados valientes a las misiones más arriesgadas. Los cuerpos fuertes aceptan
el trabajo; los débiles, se quejan. El sabio se alegra de los desafíos, y aun
en medio de los peligros exclama: '¿Era esto todo?'.”
“No te equivoques: los dioses
tratan con mayor severidad a quienes aman. Les forjan con trabajos, los
ejercitan con dificultades, los preparan para sí.”
“¿Crees que los dioses se comportan
mal contigo porque te dan la oportunidad de mostrar de qué estás hecho?”
“¿Por qué sufren los buenos? Porque
no han aprendido aún a ser verdaderamente buenos si no se prueban en la
adversidad. Piensas que es injusto que los hombres justos padezcan. Pero
observa cuánto ganan en fuerza de alma, cuánto en grandeza, cuánto en firmeza.
Nadie puede conocerse a sí mismo sin haber sido puesto a prueba.”
“¿Crees que alguien sería valiente sin
peligro, generoso sin necesidad, paciente sin dolor? Dios trata con rigor a los
buenos: los endurece, los hace suyos. Aquellos a quienes ama de verdad, los
forma con el hierro del sufrimiento, como se forja una espada: se la golpea, se
la dobla, se la calienta, se la templa. Así se hace fuerte.”
“Tú, que te quejas de tu destino, ¿no entiendes que no has sido abandonado, sino distinguido? El sabio acepta lo que viene y no se lamenta. Si es pobre, lo lleva con dignidad. Si sufre, lo convierte en virtud. Si muere, lo hace con serenidad. Porque sabe que nada le puede ser quitado realmente mientras conserve su espíritu recto.”
Si te cansas
de esta temática, puedes leer obro libro suyo, titulado “De la vida feliz”,
donde te encontraras perlas como estas:
“Todos los hombres, hermano Galión, quieren vivir
felizmente, pero andan a ciegas cuando se trata de saber qué es eso que buscan.
No es fácil alcanzar la vida feliz si no se sabe dónde está. Quien camina sin
saber el camino, más se aleja cuanto más deprisa avanza.”
“Así pues, lo primero que debemos establecer es en qué
consiste la vida feliz. A mi juicio, consiste en la paz de ánimo, en la firmeza
del juicio, en la elevación del espíritu que sabe valorar todo según su
verdadero mérito. La felicidad no proviene del azar, ni de los bienes
exteriores, sino de una vida conforme a la virtud.”
“Virtud es vivir en conformidad con la razón. Ser
virtuoso es ser libre, dueño de sí mismo, valiente frente a la adversidad,
generoso en la prosperidad, y justo en todo momento. Virtud es no temer a la
muerte, no dejarse dominar por los placeres, no desear lo que no depende de
uno.”
“¿Quieres saber quién es verdaderamente feliz? Aquel
que no se deja esclavizar por ningún deseo, que se ríe del miedo, que no se
abruma con las penas, que no se exalta con los éxitos, y que mantiene su alma
en equilibrio, como un templo inviolable.”
“Muchos buscan la felicidad en los placeres del
cuerpo, en el lujo, en el reconocimiento público. Pero esos placeres son
fugaces, y pronto se vuelven cadenas. El placer no es un guía fiable: se
arrastra, no conduce. La virtud, en cambio, camina con firmeza, sin mirar
atrás, sin depender de nadie.”
“No niego que el placer pueda acompañar al sabio, como
la sombra acompaña al cuerpo; pero no es su objetivo. La vida feliz no consiste
en buscar el placer, sino en despreciar la necesidad de él.”
“El sabio prefiere ser bueno antes que parecerlo. Vive
conforme a su conciencia, no al juicio de los demás. Su gozo está en su
interior, no en lo que el mundo aplaude.”
“Así pues, si quieres ser feliz, desprecia lo que muchos desean, y cultiva lo que pocos valoran: la rectitud de alma, la independencia interior, la armonía contigo mismo.”
Quizas llegue un momento en el que notes que tu animo está intranquilo o con algo de ansiedad, o que estas preocupada por cualquier otra cuestion que te aflige. Quizás notes consuelo con estas palabras de otro libro suyo, y fíjate que titulo tiene: “De la tranquilidad del animo”. Aquí Séneca nos invita a emprender un viaje hacia el interior de nosotros mismos, donde reside la verdadera fuente de serenidad. Lejos de buscar la paz en la riqueza, los honores o los placeres efímeros, el sabio debe cultivar una estabilidad interna que no dependa de los vaivenes del destino ni de las opiniones ajenas. La tranquilidad del alma, según Séneca, nace de la vida racional, del dominio de las pasiones, y de una aceptación serena de aquello que no podemos cambiar.
Frente a las inquietudes, la tristeza o la inconstancia que a menudo atormentan el ánimo humano, la filosofía aparece como un remedio capaz de guiar al espíritu hacia la armonía. No se trata de aislarse del mundo, sino de aprender a vivir en él sin ser arrastrado por su ruido ni por sus exigencias. Así, quien actúa con moderación, cultiva la virtud y se contenta con lo que la razón le dicta, alcanza esa rara pero profunda paz que no necesita de aplausos externos, porque nace de una conciencia en calma y de un alma que se basta a sí misma. Mira sus palabras:
“Nada hay
más hermoso ni más agradable para el hombre que una mente tranquila y apacible,
libre de pasiones violentas y de turbaciones. Porque el alma que no se altera,
que no se inquieta por los azares de la fortuna ni por las desgracias que la
alcanzan, esa alma es verdaderamente libre y dueña de sí misma. De nada debe
temer, porque todo lo que sucede, sucede conforme a la razón del universo, y lo
que nos parece adverso, forma parte del orden natural de las cosas. No es la
fortuna ni la circunstancia la que perturba nuestra paz, sino el juicio que
hacemos sobre ellas. Por eso, la sabiduría consiste en aprender a distinguir lo
que depende de nosotros y lo que no, y a no dejar que las cosas externas
gobiernen nuestra tranquilidad interior.”
"Es
absurdo perturbarse por lo que no está en nuestro poder y dejarse llevar por la
cólera, el miedo o la tristeza. Pues ninguna de estas pasiones mejora la
situación, sino que únicamente nos roba la serenidad. La verdadera libertad
reside en mantener la calma del alma frente a la adversidad, sin permitir que
los acontecimientos externos la desvíen de su curso. Por eso, es propio del
sabio aprender a dominar sus juicios y deseos, reconociendo que muchas veces
sufrimos no por lo que sucede, sino por la interpretación que hacemos de
ello."
"No es la fortuna ni la adversidad lo que hace que el ánimo se turbe, sino el modo en que la mente juzga los acontecimientos. Porque todo lo que sucede está sometido a la razón universal, y nada ocurre sin un orden determinado. El sabio, por tanto, no se deja arrastrar por la cólera ni la tristeza ante las desgracias, sino que las acepta con serenidad, comprendiendo que son parte del curso natural de la vida. La mente apacible es aquella que, sin ser insensible, no se deja dominar por las pasiones ni por los deseos desmedidos. Esta tranquilidad es la verdadera libertad, pues quien la posee no depende de nada externo para su felicidad. El camino para alcanzarla es la filosofía, que enseña a distinguir lo que está en nuestro poder —como nuestros juicios, deseos y aversiones— de lo que no lo está, como las opiniones ajenas, la fama o la riqueza. En esto consiste la verdadera fortaleza: en aprender a vivir conforme a la razón, manteniendo el equilibrio del alma ante cualquier circunstancia."
Séneca
comienza señalando que la vida no es realmente corta, sino que muchas personas
sienten que no les alcanza el tiempo porque lo malgastan. La mayoría viven como
si fueran a vivir para siempre, desperdiciando sus días en actividades
triviales, preocupaciones innecesarias y en buscar placeres efímeros. Otros, en
cambio, se dedican a la ambición desmedida, al poder o a la fama, olvidando que
todo eso no llena el alma ni da verdadera felicidad.
El filósofo
insiste en que solo aquellos que viven con atención, con conciencia de la
brevedad y finitud de la vida, pueden realmente disfrutarla. La vida debe ser
empleada en la reflexión, en la filosofía y en el cultivo interior, en lugar de
dejarse arrastrar por el ruido y la prisa del mundo.
Para Séneca,
el tiempo es el recurso más valioso que poseemos, y perderlo es equivalente a
perder la vida. Por eso, la clave está en aprovechar el presente, vivir el
momento con intensidad y propósito, y no aplazar lo importante para un futuro
incierto.
En resumen: no
es que la vida sea corta, sino que la mayoría no la vive bien; vivir plenamente
es saber administrar el tiempo con sabiduría y dedicación a lo que realmente
importa.
Veamos sus palabras:
“No es que
la vida sea corta, sino que nosotros perdemos mucho tiempo. La vida es lo suficientemente
larga, y una cantidad generosa se nos ha otorgado para la realización de las
cosas más grandes, si toda ella se empleara bien. Pero cuando la vida se
malgasta en cuidados inútiles, cuando no se dedica tiempo a sí mismo, cuando no
se hace nada propio sino que se busca en otras personas, cuando se pierden años
en la vana esperanza del futuro y se dilapidan los momentos en la pereza, al
final llega la muerte y nos encontramos sin haber vivido realmente.”
“Es verdad
que la vida nos es concedida en propiedad, pero vivimos como si solo fuéramos
sus arrendatarios, o peor aún, como si la hubiéramos tomado prestada para
devolverla sin haberla disfrutado. Todo el tiempo que no se dedica a uno mismo,
que no se consagra al cultivo del alma, es tiempo robado y perdido. Y sin
embargo, la mayoría prefieren vivir bajo la tiranía de ocupaciones ajenas,
esclavos de la rutina, entregados a los caprichos de otros, y se quejan luego
de que la vida se les escapa.”
“Quienes no
tienen tiempo para sí mismos son esclavos. No es que tengan poco tiempo, sino
que pierden mucho. La vida se nos ha dado en plenitud, pero la malgastamos.
¿Qué es más injusto que quejarnos de la brevedad de la vida cuando nosotros
mismos la acortamos con nuestra negligencia?”
“Ninguna
persona es rica en tiempo, pero muchos son pobres en uso del tiempo. La mayoría
pasan la vida como si tuvieran una cantidad infinita, y sin embargo, el tiempo
que más se desperdicia es aquel que creemos tener en abundancia.”
“Dedica
tiempo a tu propia formación, a tu alma y a la reflexión. Porque vivir sin
filosofar es estar siempre a mitad de camino hacia la verdadera vida. Sólo
quien aprende a valorarse y a cultivar su mente vive realmente.”
En resumen, a mi modo de ver la paz espiritual que todo ser humano busca, es como un edificio con tres columnas fundamentales; una de ellas es el estoicismo de Seneca y de Marco Aurelio; la otra columna es la sabiduria milenaria del budismo tibetano -maravilloso, otro dia hablarmos de esto si quieres-; y la tercera, como no, antes ahora y siempre, el mensaje original de Jesus de Nazaret; pero el mensaje original, no el mensaje trastocado e institucionalizado que proviene del Concilio de Nicea desde el año 325: hablo del mensaje primitivo y original de Jesús.
Son tres solumnas, pero el edificio es el mismo: un unico y mismo conjunto de pensamiento.
Pero por hoy ya es bastante. Sal, tomate unas cervezas y pasatelo bien.
Un abrazo y hasta pronto.
Pablo J. Gamez Rodriguez.
17/06/2025
Si vas de viaje...
...no estaria de mas que escucharas estos sabios consejos:
"Cometemos un error, Lucilio, al creer que cambiando de lugar cambiaremos de espíritu. El alma enferma lleva sus males consigo. Correr de un sitio a otro no cura la inquietud interior, sino que la alimenta. Hay que buscar la tranquilidad no en otros paisajes, sino en el interior de uno mismo."
"La vida agitada, llena de ocupaciones frenéticas, impide el reposo del alma. Pero también es dañino el ocio vacío, ese tiempo libre sin provecho. El remedio está en una ocupación equilibrada, como el estudio de la filosofía, que nos mantiene despiertos sin agotarnos y nos prepara para cualquier situación."
"La verdadera tranquilidad no consiste en estar lejos del ruido, sino en ser invulnerable a él. El alma firme no se turba ni con el bullicio del foro ni con el silencio del campo."
"Aquel que vive conforme a la razón, que se contenta con poco, que no desea lo que está fuera de su control y acepta lo que el destino le envía, ése alcanza la serenidad. Porque la paz no viene de cambiar el mundo, sino de ajustar nuestras expectativas a la naturaleza de las cosas."
(Séneca, Epistolas a Lucilio)
Saludos
Pablo J. Gamez Rodriguez
01/05/2025
BUSCANDO LA ALEGRIA DE VIVIR
Vivimos en un mundo tecnologicamente muy avanzado pero, paradójicamente, muy atrasado espiritualmente. En esta frenética sociedad de la información ultrarápida e instantánea, veo que el ser humano vive mas cómodamente que nunca porque lo tenemos todo, sin embargo la pregunta es: ¿somos mas felices que antes? Y la respueta que me surge es un rotundo NO. Hablando en general, y sálvese quien pueda, estamos muy desorientados. Dirigimos nuestra atención hacia afuera, hacia la comodidad, hacia los bienes materiales, hacia lo superficial y lo rápido; buscamos los “likes” rapidos y mientras mas mejor; si tienes mil o cinco mil “likes” crees que eres alguien, y si no piensas que no eres nadie. Vivimos pendientes del parecer ajeno, de los “influencers” y de la inmensa galeria de mercachifles y toreros de salón que hay por ahi; y no nos damos cuenta de que hemos esclavizado nuestra propia felicidad: la hacemos depender de los demás.
Nos quedamos en la forma de las cosas y no penetramos en el fondo. Y lo que es peor: no nos damos cuenta de que lo mas precioso que tenemos no hay que buscarlo fuera: está ya dentro de nosotros, lo que pasa es, eso, que hay que buscarlo. Y mucha, muchísima gente, tristemente, llega al final de su vida sin darse cuenta.
¿Y que es eso que tenemos dentro? Te animo a que lo
descubras por ti mismo/a. Si dejas de dirigir tu atención hacia el exterior
continuamente, buscando la aprobación externa, y la diriges hacia tu interior,
puede que te lleves una inmensa sorpresa.
Puedes descubrir muchas cosas.
Por ejemplo, puede que un buen dia te des cuenta de
que el mero hecho de estar vivo ya es, por si mismo, un auténtico regalo, un regalazo. Se nos ha dado todo sin pedir
nada a cambio. No hemos pagado nada por
estar aquí, todos los días abrimos los ojos gratis. Nacemos, respiramos,
andamos, nos sentamos, corremos, comemos, bebemos, hacemos el amor, dormimos,
disfrutamos: estamos aquí. En resumen: el Universo nos ha creado, gratis, y para mi eso es la máxima manifestación
del amor de Dios (llamalo, si lo prefieres, “Energía Creadora”) hacia sus criaturas, como nosotros.
Yo pienso que la vida es maravillosa, pero tiene un
problema que nos impide disfrutar de ella: nuestro ego. Nuestros padres, abuelos, y anteriores
generaciones, podrían alegar su ignorancia como excusa, pues la alfabetización completa de la sociedad
solo llegó a España en el Siglo XX, en
definitiva, ellos NO eran responsables.
Sin embargo, nosotros no podemos alegar ninguna ignorancia porque tenemos el móvil en las manos, tenemos el mundo de la información en nuestras manos; y si no hacemos uso de esa magnifica oportunidad para aprender cosas nuevas y evolucionar como seres humanos, o hacemos un mal uso de ese conocimiento y de internet, los únicos responsables seremos nosotros, y solamente nosotros.
Por tanto, si buscas en internet un poquito, te darás cuenta
y descubrirás que la felicidad humana no
termina de llegar porque hay un enemigo suelto desde hace miles de años, que se
encarga de hacernos desgraciados: nuestro ego, el cual es definido por la mayoría
de los autores como la construcción mental que hacemos -en nuestra mente- de
nosotros mismos, esto es, una identidad que nosotros mismos nos forjamos y que basamos
en nuestros pensamientos, recuerdos, roles sociales, creencias, logros,
fracasos y etiquetas como “yo soy esto” o “yo no soy aquello”. Es decir, es el “yo” que creemos ser, pero que en
realidad no somos en esencia. Es una especie de personaje, una careta o un
disfraz que nos creamos para movernos por el escenario del mundo, y que muchas veces, por desgracia, se apodera de toda nuestra conciencia.
Nuestro ego nos quita la alegría de vivir porque nos
desconecta de la realidad tal como es y de nosotros mismos en nuestro estado
más auténtico.
Y es que el ego es terrible, he aquí alguna de su fechorías: busca
validación externa de modo constante, el ego necesita ser aprobado,
admirado, reconocido (y esto nos mantiene atados a la opinión de los demás y
nos hace vivir en función de expectativas externas, lo que genera ansiedad y
frustración); además, siempre se apega a la imagen del “yo”, pues el ego
construye una identidad rígida: "yo soy exitoso", "yo soy
fracasado", "yo soy diferente", etc, con lo cual defender esa
imagen consume mucha energía y genera sufrimiento cuando la realidad no encaja
con ese ideal; además, nos hace competir en lugar de conectar, pues el
ego compara, juzga, envidia, y en vez de disfrutar el presente o celebrar a
otros, siempre está viendo quién tiene más, quién vale más, lo cual bloquea la empatía y la gratitud. Por si fuera
poco, el Ego reacciona desde el miedo y la carencia, el ego teme perder
lo que tiene o no obtener lo que desea, y vive en un modo de defensa o ataque,
lo que impide sentir paz y gozo interior. Por si fuera poco, y no contento con
esto, el ego nos desconecta del presente, siempre está en el pasado
(culpa, rencor) o en el futuro (ansiedad, expectativas).
Que se lo pregunten a mi admirado Séneca, que en su
tatado “De la tranquilidad del
alma" (De tranquillitate animi),
ya decía que los animales salvajes, cuando no están siendo perseguidos,
disfrutan de una paz natural y estan tranquilos, mientras que los seres humanos, incluso en
ausencia de peligros inmediatos, se perturban a sí mismos con recuerdos del
pasado y temores sobre el futuro.
El ego NO tiene en cuenta, ni sabe, que la alegría de vivir solo se encuentra en el aquí y ahora. Estar aqui y ahora, plenamente presentes. ¿Te duele algo ahora mismo? No. ¿Tienes todo lo que necesitas ahora mismo? Si. Entonces, ¿cual es nuestro problema ahora mismo? No mañana ni pasado, ¡ahora mismo ¿cual es tu problema?! Ninguno ¿verdad? ¿Entonces, por que no disfrutamos mas de las pequeñas cosas que la vida nos regala a cada instante, como p. ej., el placer de comerse un buen plato de manitas o unos esparragos trigueros con unos buenos amigos bebiendo un buen vino, o dar un paseo por la playa, o hacer deporte, o ver una buena pelicula, o mil ejemplos más como estos?
Y soltar el ego no significa dejar de tener
identidad, sino liberarnos del sufrimiento.
Por ejemplo, podríamos empezar preguntándonos cada dia varias veces: ¿Quién soy
yo? Diras: yo me llamo fulano/a de copas, vivo en la calle tal, de tal ciudad, mi
profesión es tal y cual, tengo esposo/a y tantos hijos. Bueno, esa es tu etiqueta externa o tu disfraz social,
pero no eres tu. Despójate de todo eso que crees ser y piensa: aparte de eso, ¿Quién
soy yo realmente, quien soy yo de verdad? ¿Quién más vive dentro de mi?
Comprobaríamos que al dejar de identificarnos con lo que no somos
realmente, regresan la paz, la
autenticidad y una alegría que no depende de las circunstancias.
Los estoicos y los budistas aconsejan superar nuestro ego de varias maneras: primeramente, observándonos sin juzgarnos. La
conciencia es el antídoto del ego. Cuando observas tus pensamientos, emociones
y reacciones sin juzgarte, creas una distancia entre “tú” y el ego. Ejemplo: en
vez de decir “soy una persona impaciente”, dices “hay impaciencia en mí ahora”.
En segundo lugar, practicar la
presencia con atención plena. Dado que el ego vive en el pasado o el futuro, el
presente lo desarma. Cuanto más presentes estamos (con la atención puesta en lo
que hacemos, sin distracción), menos poder tiene el ego. Una buena práctica
seria hacer cualquier tarea al dia, con
plena atención, sin prisa, concentrados en lo que estamos haciendo. En
tercer lugar, cultivar la humildad y la gratitud, y ojo, porque la humildad no es pensar menos de ti,
sino pensar menos en ti. En
cuarto lugar: aceptar las cosas como son. Hay que aceptar lo que es, como
es. El ego lucha contra la realidad: quiere que las cosas sean como él
desea. Trascenderlo implica aceptar las cosas como son, sin resignación,
pero sin resistencia mental. En quinto lugar, hay que conectar con algo
mas grande que nosotros. Y es que el ego
se cree el centro del universo. Sentirnos parte de algo más amplio (la
naturaleza, una comunidad, la conciencia universal) lo relativiza, con lo cual quizás
sea bueno dedicar tiempo a actividades
que nos conecten con lo sagrado, lo natural o lo colectivo: estar en la naturaleza,
ayudar a otros, practicar silencio, arte o espiritualidad. Y en sexto y
ultimo lugar, aceptar nuestros defectos. El ego es soberbio y orgulloso y suele
rechazar las partes de ti que no encajan en su “imagen perfecta”, por lo cual solo
integrando tu sombra (tus miedos, defectos, heridas) puedes liberarte de su
control. P. ej., podemos hacer una lista de cosas que criticamos en los demás,
y preguntarnos: “¿Esto existe también en mí?”
Superar el
ego es un arduo trabajo, es un camino de conciencia, que puede durar toda una
vida, y no es una meta que se alcanza de una vez, sino progresivamente. Cada
paso que damos en esa dirección nos trae mas paz, libertad y verdadera alegría.
Podríamos dejar un rato el móvil y pensar más en estas cosas, pero, claro, necesitamos tiempo. Y ese es el problema, que no tenemos tiempo. ¿No tenemos, o es la excusa que nos buscamos? Porque si algo nos interesa de verdad, si que encontramos tiempo.
La respueta, como siempre, la tienen los sabios que nos precedieron, muchos de los cuales ya he nombrado antes, y como no, nuestro Jesus de Nazaret: “No solo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios." Y si quieres otro ejemplo, Séneca (lee la epístola 17 a Lucilio, si no me crees) dijo lo mismo con otras palabras; también vió que merecia la pena seguir la senda de la iluminación espiritual: "Cuánto mejor lo que aquí se promete: ¡la libertad perpetua y no vernos obligados a obedecer a ningún dios ni a ningún hombre! Hemos de alcanzar esta meta, aunque sea pasando hambre."
¿Te animas? ¡Es una busqueda apasionante...!
Saludos.
Pablo J. Gámez Rodriguez.
18/04/2025
UNA ORACION DEL S. XXI
Tengo sesenta años cumplidos, y he acumulado el bagaje experiencial propio de la edad. No obstante, sigo aprendiendo cosas cada día, mantengo vivo mi interes y mi curiosidad, y afortunadamente aún no he perdido mi capacidad de asombro. Eso si, mientras más cosas aprendo, más me doy cuenta de lo poquito que sabemos y de lo inmenso que es el Saber. Como decía Aristóteles, “cuanto mas sabes, mas te das cuenta de que no sabes”.
Hablemos del mundo del Espiritu. Entre los numerosos maestros que me han enseñado a avanzar por la dificil pero gratificante senda de la espiritualidad humana figuran primordialmente mis estoicos (Séneca, Marco Aurelio y Epicteto) asi como los maestros Lama tibetanos; y como no, ayer, hoy y siempre Jesus de Nazaret.
Por ello tras más de veinte años leyendo y releyendo en mis ratos libres a todos estos sabios, y tras meditar y remeditar sus enseñanzas, he compuesto la ORACION que vas a leer y que transcribo al final. Me apresuro a indicar que es una oración muy personal que llevaba gestándose dentro de mi algun tiempo y que me atreví a poner por escrito hace ya algunos dias. Es una peticion que formulo al Padre Universal, Creador de todas las cosas, o si lo preferís, a esa Energia Universal que es la causa-centro-primera de todo lo creado. Llamadlo como queráis. Tiene influencias de todas esas corrientes de pensamiento.
Como apreciareis, he procurado darle un toque personal, por eso hablo en primera persona, la he enfocado como un coloquio directo que sostengo con mi/nuestro Padre Universal. Y lo llamo "Padre" con la intencion de sentir su cercania, como Jesús, que llamaba a su Padre como "Abba" (se podria traducir, segun muchos autores, por el popular término "Papá"). ¿Razon de su publicacion? Muy sencilla: ayudar a quien quiera tener alguno tipo de contacto con lo Trascendente. Y aunque el coloquio con Dios es algo muy personal de cada uno, aqui está el mio, y lo publico con la mejor de mis intenciones, a fin de que os pueda servir y ayudar como a mi, sin perjuicio de que cada persona pueda personalizar su propia oración.
¿Por que? Porque estoy firmemente convencido de que todos los seres humanos de este mundo, sin distinción de raza, somos hermanos y que el mundo es una aldea global, las fronteras solo son eso, una línea imaginaria en el mapa. Todos nacemos y morimos del mismo modo, y sentimos las mismas necesidades, no solo materiales, sino espirituales. Séneca dijo en uno de sus textos que su patria era el mundo entero. Yo, dos mil años después, tambien lo pienso.
Además, porque entiendo también que no solo es válida como oración, sino también como un ejercicio de autoafirmación personal ante la locura de este mundo frenético en el que vivimos, en un intento por traer a nuestras vidas lucidez, serenidad y paz mental y emocional: merece la pena, ya lo creo, emprender el camino en busqueda de la paz mental y emocional. Blaise Pascal, un autentico genio matemático y filosófico, ya lo advirtió en 1.670, cuando escribió que "la infelicidad del hombre se basa solo en una cosa: que es incapaz de quedarse quieto en su habitación". Ya entonces llevaba razón, y creo que ahora aun más.
Y es que en esta sociedad que -por desgracia- no puede vivir sin móvil y en la que todos parecemos huir de la soledad y, lo que es peor, de nosotros mismos, es un gran logro dejar de mirar hacia el exterior, y comenzar la apasionante busqueda personal del auténtico y genuino Tesoro -lo escribo con mayúscula- que todos tenemos muy dentro de nosotros y que los grandes sabios que nos precedieron supieron vislumbrar.
Gran búsqueda esa, ya lo creo. ¡Animo, merece la pena! "Pedid y rercibireis, llamad y se os abrirá, buscad y encontrareis", dijo Jesús. Apaguemos un rato el movil y demonos un paseo por ahi, en soledad, o bien hagamos un poco de Meditación, Yoga, Mindfulness, o similares. ¡Al menos podremos encontrarnos con nosotros mismos! Vivimos en medio de millones de estimulos con la atencion siempre hacia fuera, lo cual creo que es un error; pues, sin olvidar que el ser humano es un ser social, obviamente, creo que de vez en cuando debemos de mirar tambien hacia nosotros mismos, hacia adentro; a ver si somos capaces de quedarnos quietos en nuestra habitacion un buen rato, contrariamente a lo que decia Baise Pascal.
En todo caso, reivindico el placer de una buena conversacion sobre estos temas, como las que he tenido ultimamente con mi buen amigo F.H., con el cual he comentado algunas ideas de esta Oración, y que me ha aportado sus puntos de vista.
Mi oracion dice asi:Envíame tu Reino, el Reino de
tu Luz y de tu Espíritu. Abre mi mente y mi visión del mundo
y hazme capaz de captar las realidades espirituales que existen mas allá de
nuestra corta y miope percepción sensorial.
Dame tu luz y purifica mi
cuerpo, mi corazón, mis palabras, obras y pensamientos; conviérteme en un Ser
lleno de tu luz. Bendice mi vida y purifica
y limpia mi mente de todos sus prejuicios e impurezas, para que sea capaz de
comprender y apreciar quienes somos de verdad, y no lo que este loco mundo
consumista quiere que creamos que somos.
Dame tu serenidad; concédele la Paz a mi mente y a mi espíritu, líbrame de toda perturbación interior, y dame fuerza para afrontar las dificultades de la vida.
Cumplase siempre tu voluntad, y dame la serenidad necesaria para aceptar lo que no puedo cambiar, el valor para cambiar lo que si puedo cambiar, y la sabiduria necesaria para apreciar la diferencia.
Dame cada día el pan necesario, y no solo el alimento que el cuerpo necesita, sino fundamentalmente el
alimento espiritual que precisa nuestro Espíritu y el Ser interior de Luz que
todos estamos llamados a ser.
Concédeme la iluminación y la
sabiduría para saber comprender y discernir el mensaje de los grandes maestros que nos han precedido, asi como los misterios que mi mente no
alcanza.
En comparacion con tu Inmensidad, somos tan poca cosa que no se como podemos ofenderte. No obstante, ten misericordia de mí y perdona mis ofensas hacia Ti y hacia mis hermanos. Dame humildad para pedir perdon cuando lastime a mis hermanos, y concédeme la luz del espíritu para que sepa ver a los demás con caridad y amor como lo que son, mis hermanos. Enséñame a perdonar a quien me ofenda, dame sabiduría y amor para perdonar y no me dejes caer en el rencor.
No me dejes caer en la
tentación del desánimo, cuando me veas caído, ayúdame a levantarme y a seguir
caminando con alegría e ilusión.
No me dejes caer tampoco en la
tentación del necio orgullo del materialismo cientifico, ni en ninguna forma de materialismo; no permitas que me seduzcan los mensajes del “tanto
vales cuanto tienes”, ni las proclamas ensalzadoras de la fama, belleza, dinero ó
poder, cosas efímeras y caducas.
Dame sabiduría, Padre, y concédeme
la virtud de la coherencia para poner en práctica mis convicciones; dame
valentía para predicar no con palabras, sino con mi ejemplo.
Líbrame de todos los males de este mundo y no dejes que me seduzcan con su mensaje. Líbrame de mi Ego, presumido y egoísta, de sus apegos, de los miedos que me inspira y de todas sus asechanzas; líbrame de mi orgullo, de mi avaricia, de mi ira y de todos mis demás defectos. Dame pureza de intención.
Al amanecer de cada dia, inspirame gratitud, dado que la vida es un regalo y nos lo has dado todo sin pedir nada a cambio.
Haz que viva esta vida con alegría y con esperanza, Padre mio. Y cuando llegue mi hora de partir, dame una muerte tranquila, y permite que emprenda el viaje con plena conciencia, y con alegría y esperanza."
Saludos.
En Jódar, a 18.04.2025.
Escrito y Publicado por Pablo Jesús Gámez Rodríguez.
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27/02/2025
La pregunta
Hoy te propongo hacerte reflexionar. Deja tu mente en blanco, y olvidate del móvil por un momento. Relajate. Te voy a proponer una simple pregunta, con animo de hacerte pensar un poco. Vas a elegir entre dos cosas que vamos a considerar como incompatibles entre si, es decir, que si te quedas con la una, has de renunciar a la otra. La pregunta es esta: Si te dieran a elegir entre ser RICO y ser FELIZ ¿ tu que elegirias?
Para responder a la pregunta:
1.- No valen evasivas del tipo “ambas cosas no son
incompatibles, se puede ser rico y feliz”, no. Hemos quedado en que son magnitudes incompatibles,
has de elegir entre una y otra, en eso esta el quid de la cuestión.
2.- Tampoco valen otros subterfugios del tipo: “ya soy feliz, ahora quiero ser rico”, que no, déjate de trampas; o memeces del tipo "el dinero da la felicidad, si tienes dinero puedes conseguir todo en este mundo", que no, tu eres mucho mas listo que eso, dejate de trampas, pues que yo sepa, el dinero ni puede comprar el amor y cariño de verdad, ni puede comprar o hacer que regrese la juventud perdida, ni puede comprar la salud, ni puede comprar la sabiduria; un tonto con dinero no deja de ser un tonto, aunque lo llamen "Don Tomas", en vez de "Tomas".
3.- Tampoco valen otros recursos para evadir la pregunta, como considerar que dinero y felicidad no son, por si mismas, incompatibles, pues la realidad es que son incompatibles en la mayoria de los casos, de hecho, cuando llegas a ser rico, no se acaban tus preocupaciones, sino que cambias unas preocupaciones por otras, y a no ser que seas alguien especial, el dinero suele esclavizar a la gente.
4.- Resumen: Se sincero al responder, elige una cosa ú otra. La pregunta tiene por
objeto que seas sincero contigo mismo y pienses y medites si para ti es mas
importante poseer bienes materiales, o ser feliz.
EPILOGO. Recuerda que en este mundo se puede ser un perfecto desgraciado teniéndolo todo, y se puede ser feliz sin tener absolutamente nada, abre tu mente y mira por ahí y veras que hay muchos ejemplos. Piensa 5 minutos al dia en esto, no mas, te aseguro que es un ejercicio muy saludable.
Además, recuerda que desnudos nacemos, y desnudos hemos de partir cuando llegue nuestra ultima hora. Entonces, ¿Qué?
Pablo J. Gamez Rodriguez.